El Parlamento japonés reeligió este miércoles como primer ministro al conservador Shinzo Abe, diez días después de la victoria de su Partido Liberal-Democrático (PLD) en unas elecciones legislativas anticipadas.

Sin un rival real, Abe contó con los votos de 328 de los 470 parlamentarios de la Cámara Baja, lo que le pone por tercera vez en su carrera política al frente del archipiélago nipón.

La reelección de Abe era un simple trámite ya que el PLD dispone de 291 diputados y su aliado centrista Nuevo Komeito 35. El reelecto primer ministro enfrentó a cuatro candidatos que no tenían ninguna chance.

El dirigente del Partido Demócrata de Japón (PDJ), centro-izquierda, obtuvo por su parte 73 votos en diputados y 61 en el Senado.

El 14 de diciembre pasado el partido de Abe había ganado fácilmente las elecciones legislativas, en las cuales se registró una abstención récord. Además, la victoria de Abe fue facilitada por las divisiones de la oposición.

En principio, Shinzo Abe dará a conocer su gobierno este miércoles y, según los medios de prensa, probablemente mantenga en sus cargos a todos los ministros, salvo el de Defensa, Akinori Eto, que sería remplazado por Gen Nakatani, un experto en seguridad nacional y lucha contra el terrorismo.

Después de formar el gobierno, Abe será recibido por el emperador Akihito, que debe validar oficialmente la composición del gabinete.

Shinzo Abe va a continuar con la política económica, la “abenomics”, aplicada desde diciembre de 2012, fecha de su retorno al poder tras un primer mandato en 2006/07, que fue un fracaso.

El éxito inicial de la “abenomics”, que combina amplitud presupuestaria, flexibilidad monetaria y reformas de estructuras, permitió una baja del yen y un aumento moderado de la inflación y del crecimiento.

Sin embargo, en los últimos meses se agotaron los efectos positivos y en el tercer trimestre de 2014 Japón entró de nuevo en recesión, debido en parte a un aumento del IVA en abril.

“La economía sigue siendo prioritaria, pero también quiero reforzar el papel diplomático de Japón y garantizar su seguridad”, dijo durante la campaña el primer ministro.

Abe desea en particular modificar la Constitución y aprobar leyes relativas a la seguridad y la defensa.