El subsecretario de Pesca, Pablo Galilea, afirmó que la gran masa de pescadores artesanales quiere la criticada Ley de Pesca y cuestionó las movilizaciones que, según él, son financiadas por intereses extranjeros.

Ante la pregunta sobre la tozudez del Gobierno en defender la ley y que el recurso marino quedaría en manos de las siete familias más poderosas del país, Galilea aseguró que hay mucha mentira y que los grupos movilizados no dimensionan los beneficios que obtendrían con la aplicación de esta reforma.

El subsecretario señaló que los verdaderos actores no son consultados, en este caso la Conapach -liderada por Zoila Bustamante- y la Confepach de Hugo Arancibia, que juntos representan al 80% por ciento de los artesanales. La autoridad aseguró que los medios le dan cobertura “a un poco de humo” cuando la gran mayoría está con sus faenas en el mar.

Galilea recordó que el 55% de los desembarques pesqueros del país los realizan los artesanales, subrayando que las afirmaciones donde se asegura que el mar quedaría en manos de los más ricos son mentiras. Además, existen 50 empresas que desarrollan faenas productivas y finalmente reconoció la existencia de poderosos grupos económicos que están abiertos a la bolsa, pero añadió que ahí pueden participar muchos chilenos como accionistas -por ejemplo las AFP- y que dan trabajo a 50 mil compatriotas.

Sin embargo fustigó a los movilizados a deponer sus acciones e informarse mejor y no dejarse llevar por intereses políticos financiados con recursos extranjeros.

Dentro de los beneficios que entregará esta reforma a la Ley de Pesca que se discutirá desde la próxima semana en el Senado está el fraccionamiento entre el sector industrial y el artesanal, donde se percibirían más de 30 millones de dólares al año directamente hacia ellos.

Además considera el resguardo con especialistas de los recursos para evitar la depredación con mejores criterios técnicos y científicos. Junto a ello, se le quitan atribuciones resolutivas al Consejo Nacional de Pesca sobre el modo de fijación de cuotas y considera la creación de una especie de INDAP pesquero, protección de las cinco millas que busca la recuperación y sustentabilidad de los recursos.

Galilea también se refirió sobre la no inclusión en esta discusión de las comunidades lafquenches a pesar que también subsisten del recurso marino.

El subsecretario confía que el Senado le dará el espaldarazo a esta reforma a la ley de pesca para beneficiar y resguardar el mar para todos.