Hasta el Séptimo Juzgado de Garantía llegó un grupo de vecinos de Santiago, en compañía del alcalde Pablo Zalaquett, para interponer una querella criminal por el delito de desórdenes públicos en forma reiterada en contra de Ricardo Cid Castro, un pastor de la iglesia Corporación Evangélica Impacto de Dios.

Esta demanda se presentó luego de que el pastor realizó un evento de proporciones en las calles Aldunate con Copiapó, sin autorización ni medidas de seguridad, cortando el tránsito y provocando ruidos que molestaron a los vecinos.

El alcalde Pablo Zalaquett indicó que el templo evangélico donde realiza sus prédicas Ricardo Cid, había sido clausurado y pese a eso el pastor no respetó la decisión municipal, lo que provocó la presentación de esta querella.