Las cenas navideñas en Chile han cambiado con los años, adoptando tradiciones extranjeras y cambiando los postres frutales por elementos más cremosos y elaborados, aunque hay cosas que perduran hasta hoy.

Un debate sobre el menú de Navidad en Chile ha surgido durante los últimos años luego de que comenzara a hacerse más frecuente el consumo de pavo en las cenas de los chilenos, y es que, antiguamente, este alimento no era muy popular en el país.

La tradición en realidad proviene de Norteamérica y Reino Unido, puesto que en Chile siempre fue más común consumir pollo o carnes rojas para las fiestas de fin de año.

De hecho, algunas décadas atrás, el consumo de pavo en Chile era poco accesible, así lo plantea Cristóbal García-Huidobro, historiador chileno de la Universidad Católica (UC) y la Universidad de Santiago de Chile (USACH). “Antes era muy difícil o caro de conseguir en la ciudad, y se consumía más en el campo”, explica.

“Tradicionalmente, la cena de Navidad consistía en algún plato de carne o pollo (…). Sin embargo, a partir de los 90 se da una masificación en la producción industrial de los pavos, por lo tanto, eso permitió emular hasta cierto punto las cenas navideñas del mundo anglosajón“, agrega.

¿Cuál es el menú de Navidad promedio en Chile?

A pesar de que el pavo cada vez es más frecuente en Chile, emulando tradiciones extranjeras, hay cosas propias del país que han perdurado y se han reforzado en el tiempo. Elementos que, en una mesa chilena, no pueden faltar para fin de año, como las papas duquesas, por ejemplo.

Lo de las papas duquesas es bien notable, porque se terminó transformando en una tradición, tanto para Navidad como para Año Nuevo”, asegura.

El experto señala que la base del plato navideño sería por ahora “algún tipo de ave”, entre el pavo y el pollo, siendo este último el más común todavía. Aunque pueden variar según la zona del país.

“Efectivamente, las cenas varían en su contenido regional: hacia el sur vas a encontrar mayor presencia de cordero, incluso de pescados y mariscos, así como también embutidos. Mientras que en la zona central encuentras lo que tradicionalmente entendemos como el menú navideño de los últimos tiempos“, dice.

En el norte por su parte, dice García-Huidobro, el cordero también se consume en lugares rurales y en la costa algunos pescados, aunque también predominan las aves. “Lo que sí se mantiene siempre es la gran cantidad de alcohol que está disponible para acompañar la comida”, enfatiza.

Postres de los chilenos en Navidad

Toda buena cena culmina con un postre, aquel toque dulce que templa los sabores salados de las ensaladas y las carnes. En Chile, dice el experto, predominaban las frutas, que actualmente ha sido sustituidas por helados o postres cremosos.

“Usualmente, los duraznos y piñas con crema todavía siguen siendo parte del menú en cuanto a los postres, aunque han pasado a ser despreciados”, admite. “Fueron sustituidos por helados, especialmente por los calores. Tortas o pasteles, y en general, cosas más elaboradas”.

Asimismo, quedan algunos más tradicionales que se mantienen en menor medida. “Hay postres que se servían antes, y que ya casi no se hacen, por ejemplo la sémola con salsa de vino, la leche asada, y otras deliciosas producciones dulces”, concluye.