Durante los últimos meses, donde hemos enfrentado diversas crisis producto de la pandemia del covid-19, la vida nos ha hecho reflexionar. Desde lo familiar a lo laboral cambiaron nuestros paradigmas y la forma en que actuamos. En algunos casos, colapsados y cansados, hemos sacado nuestra peor versión. En otras, lo mejor de lo nuestro, demostrando resiliencia, empatía, comprensión, apoyo, solidaridad y generosidad.

Ahora que estamos ad portas de cerrar este 2020, los invito a pensar y preguntarnos a nosotros mismos: ¿Qué acciones hemos hecho realmente De Corazón? ¿Cómo nos hemos sentido con ello? ¿Lo hemos hecho solos o con el apoyo de nuestro entorno?

En el mundo existen 79,5 millones de personas que han sido desplazadas a la fuerza de su país de origen, lo que corresponde al 1% de la población mundial. Esta no es una realidad lejana. En América Latina, 5,5 millones de personas venezolanas se han visto obligados a huir de sus hogares y a desplazarse a otros países del continente y del mundo, dejando atrás todo lo que conocían y les era familiar hasta entonces.

En vista de esta necesidad, desde el Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados, ACNUR, nos hemos enfocado en responder a la emergencia. Nuestros equipos se han concentrado en brindar soluciones inmediatas y han redoblado los esfuerzos y alianzas con socios y donantes para entregar soluciones duraderas que nos permitan dar respuesta a nuestro mandato: la protección internacional de las personas refugiadas y la búsqueda de soluciones duraderas.

Es así como surge #DeCorazón, una plataforma digital inédita en Chile que ofrece talleres gratuitos liderados por personas refugiadas y migrantes. Considerando las necesidades más urgentes, como lo son la empleabilidad y el bienestar emocional, esta iniciativa busca retribuir la ayuda brindada por Chile a las comunidades de acogida, a través de la entrega de herramientas que permitan a chilenos y extranjeros, prepararse y potenciar el desarrollo económico y social del país.

Considerando la necesidad de disminuir los índices de desempleo, potenciar la fuerza laboral y apoyar la reactivación económica, las capacitaciones laborales abarcan desde la preparación para una entrevista laboral, presencial o remota, a talleres sobre cómo emprender en Chile.

En el caso del bienestar emocional, todos hemos sido testigos del daño que nos ha provocado el encierro y la necesidad imperante de adaptarnos a los cambios rápidamente. Por eso, los colaboradores de corazón liderarán talleres sobre “cómo promover la comunicación en el hogar”, “cómo elegir actividades que alivien mi estrés” y varios más.

¡Quién mejor que ellos, que producto de sus vivencias personales han debido levantarse y reinventarse una y otra vez!
Esta iniciativa, www.talleresdecorazon.cl, sin duda, nos invita nuevamente a reflexionar. Es cierto que no podemos cambiar el mundo, pero sí podemos cambiar nuestros entornos. ¿Cómo? Con gestos simples, de corazón, que unan esfuerzos para mirarnos como iguales, como seres humanos, derribando las barreras del prejuicio, la discriminación, la xenofobia y el racismo, que generan tanto daño social.

No es una tarea fácil y tampoco se logra de la noche a la mañana, pero consideramos que esta plataforma, pionera en América Latina, nos permite cerrar exitosamente un año 2020, donde gracias al trabajo del equipo de ACNUR Chile y sus socios se logró entregar más de 48.480 asistencias, y abrir un 2021 generando inclusión, cooperación y retroalimentación en áreas indispensables para Chile.

Por nuestra parte, desde ACNUR seguiremos trabajando junto al Gobierno nacional, los gobiernos locales, las distintas agencias del Sistema de Naciones Unidas, la Sociedad Civil, el sector privado, la academia, entre tantos otros actores para seguir cumpliendo con nuestro mandato: la protección internacional de las personas refugiadas, que sin duda, tienen mucho que aportar #DeCorazón, a las comunidades de acogida y al país.

Juan Carlos Murillo
Representante Regional para América del Sur
Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados

Nuestra sección de OPINIÓN es un espacio abierto, por lo que el contenido vertido en esta columna es de exclusiva responsabilidad de su autor, y no refleja necesariamente la línea editorial de BioBioChile