En las últimas horas un intenso olor presuntamente a gas alertó a vecinos de gran parte de Santiago. Desde la Onemi indicaron que no se ha podido determinar la fuente que causó la situación.
Ante lo anterior, el inspector del departamento de Planificación de Operaciones Hazmat del Cuerpo de Bomberos de Santiago, Sergio Poblete, indicó en Expreso Bío Bío que recibieron llamadas de nueve comunas, más de 300, que informaron un fuerte olor a gas, por lo que la unidad despachó cinco salidas de máquinas con los equipos para detectar y monitorear las concentraciones.
“Detectaron olor a gas en el ambiente pero no se pudo determinar el origen y eso es explicable bajo del punto de vista físico químico, porque los gases combustibles domiciliarios son de dos tipos: natural que corresponde a metano y el gas licuado de petróleo”, explicó.
Detalló que el gas ocupa todo el volumen que continente, es decir, un cilindro, una habitación, pero en el caso particular de ayer, un favor importante fueron las bajas temperaturas.
“Las temperaturas eran muy bajas anoche, por lo tanto, los gases se mantuvieron muy cerca del suelo y se dispersaban poco (…) entonces la concentración que la gente sentía era muy fuerte”.
De esta forma, a medida que la temperatura aumentó, los gases subieron y se diluyeron, disminuyendo el mal olor.
“Creemos que el viento corrió la nube en distintas partes de la región Metropolitana”, agregó.
Al estar diluido del olor, aclaró que “es difícil que se produzca una explosión por combustión, es muy difícil que la gente dentro de sus casas se sofoque (…) el peligro ha disminuido”.
Precisó que “independiente de la fuga de gas que se tenga, lo que tiene que hacer es evitar entregarle energía a la atmósfera que tiene gas, porque cuando el gas se mezcla con el aire, el segundo se va enriqueciendo y llega un punto que se llama límite de explosión de ahí en adelante cualquier entrega de energía puede generar la explosión”.
Sobre por qué en el caso puntual no se logró identificar el origen, Poblete dijo que “puede ser que esté en una zona bastante lejana a la jurisdicción del cuerpo de Bomberos de Santiago (…) y no lo vamos a detectar si no tenemos el equipo específico”.
Aclaró que no tuvieron reportes de personas desvanecidas o inconscientes que son uno de los parámetros para saber si se trata o no de una fuga de gas tóxico.
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