Nacional
Cordero advierte que gran desafío de la oposición es saber "cómo encauzar" su relación con caso Audio
Miércoles 11 septiembre de 2024 | 10:00
Archivo / Agencia UNO
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El ministro de Justicia, Luis Cordero, abordó la relación de la oposición con el "caso Audio", destacando que "no todo conflicto de interés es delito" y advirtiendo a Chile Vamos sobre la necesidad de asumir su responsabilidad pública en el caso. En Radio Universidad de Chile, Cordero defendió la presunción de inocencia de Luis Hermosilla y llamó a considerar la dimensión política de la situación, alertando sobre la posible implicación de figuras de la oposición en irregularidades que no necesariamente son penales. Subrayó que aunque no sean delitos, estas irregularidades comprometen la fe pública, concluyendo que el desafío de la oposición es cómo gestionar su responsabilidad pública en un debate político y no jurídico.
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Durante la mañana de este miércoles, el ministro de Justicia, Luis Cordero, abordó la relación de la oposición con el denominado “caso Audio”. Al respecto, recalcó que “no todo conflicto de interés es delito” y advirtió Chile Vamos debe saber “cómo encauzar su responsabilidad pública” por su relación con el caso.
En conversación con Radio Universidad de Chile, el secretario de Estado se tomó con mesura los antecedentes que vinculan a Luis Hermosilla con Andrés Chadwick, recalcando la “presunción de inocencia” del extitular de Interior.
“Como toda persona que esta siendo objeto de investigación, se llame Andres Chadwick o se llame Pedro Pérez, hay presuncion de inocencia, por cierto. Pero también hay una dimensión política”, afirmó Cordero.
En ese sentido, alertó que políticamente, “hay una interpelación en medida que figuras de la oposición -que antes pudieron ser del oficialismo- puedan estar involucradas en aspectos que están vinculados a irregularidades”. Las cuales, destacó, no son necesariamente penales, pues los conflictos de interés pueden no ser delitos.
“No todo conflicto de interés es delito, pero a la vez, este tema es grave porque en el entendido de que todas las las irregularidades que hay, aunque no sean delitos, comprometen la fe pública“, manifestó.
Así, el ministro concluyó que el “gran desafio de la oposición tiene que ver en cómo encauzar su responsabilidad publica, teniendo en cuenta que en este aspecto, el debate es político y no jurídico”.
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