El Papa Francisco calificó como una "monstruosidad" los abusos sexuales perpetrados por miembros de la Iglesia Católica y negó que el celibato sea una razón para que se cometan estos actos. En ese sentido, dijo que estos ilícitos se dan en mayor cifras dentro de la familia, donde aún se "tapan".

Este lunes se publicó una entrevista al Papa Francisco, jefe de la Iglesia Católica, quien condenó los abusos sexuales por parte de miembros de la institución, pero lamentó que estos “se tapen” cuando se dan dentro de las familias.

De igual forma, la máxima autoridad del Vaticano, negó que estos actos de abuso se produzcan a raíz del celibato de sus miembros.

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Papa Francisco y los abusos de la Iglesia

El medio CNN Portugal, realizó una entrevista al Papa Francisco el pasado 11 de agosto, la que finalmente se reveló este lunes 5 de septiembre.

En ella, el Sumo Pontífice aclaró que “el abuso de hombres y mujeres de iglesia, abuso de autoridad, abuso de poder y abuso sexual es una monstruosidad. Porque el hombre o mujer de iglesia, está llamado a servir, a crear unidad, a hacer crecer, y el abuso destruye siempre”.

En ese sentido, valoró que estos ilícitos se hagan conocidos, pero apuntó con dureza contra los abusos que suceden en el seno de las familias.

“Se sabe y eso está muy bien. Pero, lo que no se sabe, porque se tapa todavía es el abuso dentro de la familia”.

En esa misma línea, el Papa Francisco aseguró que el abuso no está relacionado con el celibato de la Iglesia: “Y después te vienen con preguntas. “¿No será que el celibato…?” No es nada del celibato (…) porque en las familias no hay celibato y todo eso y a veces sucede”.

“Entonces es simplemente la monstruosidad de un hombre o una mujer de iglesia que está enfermo psicológicamente o es malvado y usa su postura para su satisfacción personal. Es diabólico”, dijo el Papa.

Por último, respecto a los abusos de la Iglesia, el pontífice de origen argentino mencionó que solo el 3% de los abusos se dan dentro de la Iglesia, frente al 46% dentro de las familias, en el mundo del deporte o en las escuelas.

Si bien, la autoridad eclesiástica considera esta cifra como baja, para él, no deja de ser condenable. “Es poco 3%, aunque fuera uno solo, es una monstruosidad”, sentenció.