El portaaeronaves de la Armada de Estados Unidos 'USS Ronald Reagan' se adentró este jueves en aguas del mar de China Meridional en pleno aumento de la tensión con China por la posible visita de la presidenta de la Cámara de Representantes estadounidense, Nancy Pelosi, a Taiwán. En paralelo, la esperada llamada telefónica entre el presidente estadounidense, Joe Biden, y su homólogo chino, Xi Jinping, comenzó a las 8:33 horas chilenas.

La Séptima Flota de los Estados Unidos indicó en un comunicado que la maniobra se enmarca en una operación programada y que el buque abandonó el martes la base naval Changi, en Singapur.

La travesía tiene lugar poco después de que el portavoz del Ministerio de Exteriores chino, Zhao Lijian, señalara que Pekín “se está preparando” ante la posibilidad de que Pelosi visite Taiwán, al que el gigante asiático considera una provincia más bajo su soberanía.

No obstante, la Séptima Flota puntualizó que el buque ha estado realizando operaciones marítimas en materia de seguridad antes de llegar al mar de China Meridional. Esto incluye operaciones marítimas y de vuelo, así como ejercicios tácticos coordinados entre tropas en tierra y aire.

“El ‘USS Ronald Reagan se encuentran de camino, operando en el mar de China Meridional tras una visita exitosa a Singapur”, indicó la comandante Hayley Sims, portavoz de la Séptima Flota. “El buque sigue operando con normalidad y de forma rutinaria haciendo sus labores de patrulla para mantener una región del Indo-Pacífica abierta”.

Llamada entre líderes mundiales

La Casa Blanca informó del inicio de la llamada telefónica y, como es tradición en estos casos, al concluir habrá un comunicado con su contenido.

Se trata del quinto intercambio telefónico de los dos líderes desde que Biden llegó a la Casa Blanca en enero 2021.

La llamada ha despertado especial atención debido a las tensiones entre las dos potencias por la guerra en Ucrania, en la que China apoya a Rusia, los aranceles estadounidenses sobre productos chinos y, sobre todo, el posible viaje a Taiwán de Pelosi.

La líder demócrata anunció sus planes de ir a Taiwán en abril, pero tuvo que suspender el viaje por contraer la covid-19; y ahora, según algunos medios estadounidenses, está haciendo preparativos para visitar la isla este verano, aunque su oficina no ha hecho todavía ningún anuncio oficial.

En respuesta, el Gobierno chino avisó que responderá con “medidas enérgicas” si Pelosi visita Taiwán, en la que sería la primera visita de un presidente de la Cámara de Representante de EE.UU. a Taiwán desde 1997, cuando Newt Gingrich visitó la isla.

Taiwán es uno de los mayores motivos de conflicto entre China y Estados Unidos, debido sobre todo a que Washington es el principal suministrador de armas de Taiwán y sería su mayor aliado militar en caso de un eventual conflicto bélico con China.

En 1979, tras romper los lazos diplomáticos con Taipéi y establecerlos con Pekín, Estados Unidos adoptó el Acta de Relaciones de Taiwán, en la que se comprometía con la defensa de la isla y el suministro de equipos bélicos.