Todos conocen a Álvaro Espinoza, principalmente, por sus roles de villanos en diferentes teleseries. Lo que pocos saben, es que lleva más de 20 años de relación con la actriz Catalina Olcay.

Su historia comenzó cuando el director Herval Abreu comenzó a buscar al intérprete que daría vida a la pareja de Olcay en la teleserie de Mega(visión) A todo dar (1998).

Abreu le mostró un video de Espinoza a la actriz y ella lo encontró muy guapo, pero tras conocerse en persona su opinión cambió un poco.

“Después me dicen ‘Quedó este cabro‘ y yo dije, ‘Ya que rico’. Cuando llegamos a la reunión de elenco, se sienta al lado y digo ‘Este no es él’. Se veía completamente distinto. Se sienta, súper serio, como que no pescaba a nadie”, afirmó Olcay en el programa Yo Invito de La Red.

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Luego de eso comenzaron a trabajar juntos y se volvieron amigos inseparables, sin embargo, su relación comenzó recién cuando terminaron las grabaciones de la producción.

“Después empezamos a ser muy amigos, me caía increíble. Álvaro es muy generoso, muy buen partner, también guapo, es muy simpático, tiene un sentido del humor increíble… En un minuto lo vi bailando, no sé por qué, y de repente lo miré y dije ‘ay, lo amo"”, agregó en Las Últimas Noticias.

CHV
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Hoy llevan 21 años de relación y dos hijas en común. Sin embargo, la actriz dice que no hay una receta para una relación de tantos años.

“Siento que somos un complemento, estar con alguien que es igual a ti yo lo encuentro fome, ¿o no? La cuestión es que uno se pueda complementar bien. Creo que nadie tiene una receta para tener éxito en esto. En el día a día van pasando cosas y uno las va surfeando”, explicó, agregando que los celos no son un problema entre ellos.

“Hay ciertas cosas que a mí me parecen importantes: no me gustaría estar con una persona celosa porque siento que eso denota inseguridad”, explicó.

“A Álvaro creo que le pasa lo mismo. Si no uno tendría que estar restringiéndose todo el rato, y yo no podría. Siento que las personas celosas no lo pasan bien porque están todo el rato dudando, cuestionándose por cosas como que lo miraron o cuestiones así”, reconoció.