Con más de 10 millones de descargas, Zepeto se convirtió rápidamente en una de las aplicaciones más populares de este último mes en América Latina y Chile.
Esta aplicación de origen asiático permite a los usuarios crearse un avatar digital para interactuar con otras personas. En tanto, uno de los mayores atractivos de la plataforma son las opciones de personalización que ofrece a los cibernautas.
Con opciones que van desde crear el rostro de tu avatar basándose en una foto del rostro del usuario, hasta comprarle ropa, accesorios y acciones, Zepeto se convirtió en una moda entre los smartphones de adolescentes y niños.
No obstante, desde inicios de diciembre comenzaron a circular rumores sobre la verdadera intencionalidad de la aplicación. Considerando que ésta pide permisos para tomar fotografías y videos, grabar audios, acceder a las fotos, contenido multimedia y archivos, con el objetivo de “crear un avatar más personalizado”, algunos populares youtubers argumentaron que la aplicación tiene el fin de espiar a sus usuarios.
Otro de los argumentos radica en la empresa detrás de Zepeto: Snow Corporation (con sedes en China, Corea y Japón, y responsable de crear gran parte de las aplicaciones de “filtros” que usas) la que pertenece a la gigante de Internet Naver, que creó uno de los navegadores más importantes de la red, pero que en Occidente no es conocido, puesto que Google ocupa ese lugar en este lado del planeta.
Fue esta empresa, que además se esmera en recopilar datos de los internautas, la que lanzó Zepeto en agosto de 2018, en países orientales, y que estas últimas semanas ha ganado millones de adeptos en Latinoamérica. No obstante, ¿puede Zepeto espiarte?
BioBioChile conversó con Dmitry Bestuzhev, director del Equipo Global de Investigación y Análisis de Kaspersky Lab en América Latina (compañía de seguridad informática), quien señaló que Zepeto no puede espiar a sus usuarios.
“De acuerdo al análisis de los permisos que requiere la aplicación en el celular y también el análisis de código de la aplicación, ésta no tiene funciones de rastreo del usuario”, consideró el experto.
Sin embargo, debido a los permisos otorgados, la utilización que la app le de a tus datos dependerá de su contrato de uso. “Una app puede hacer todo con tus datos. Sencillamente, si es que el contrato sobre el uso de la información es ambiguo, entonces se podrán usar datos para cualquier fin y no se podrá predecir cómo éstos serán manejados”, dijo.
Quienes han usado Zepeto, saben que lo primero que solicita la aplicación es una foto del rostro del usuario. En relación a si la app puede usar esta imagen con otros fines, Bestuzhev opinó que depende de si la empresa comparte o no los datos con terceros. “Si lo hace, entonces técnicamente lo podría hacer”, agregó.
En tanto, esta advertencia no es sólo para Zepeto: también se extiende a todas las aplicaciones que se usan a diario. El especialista explicó que mientras que la privacidad depende del contrato y los permisos, la seguridad “se puede confirmar únicamente a través de una auditoría de código y, de forma paralela, se debe revisar si está limpio de código malicioso”.
Finalmente, es importante mencionar que los padres deben estar al tanto de las aplicaciones que usan sus hijos menores de edad y la forma en que éstas funcionan.