Estados Unidos dio este sábado un paso más en su apoyo a la oposición siria, anunciando el suministro de material militar defensivo a la rebelión -aunque no armas- al anunciar en Estambul que duplicará su ayuda directa y el suministro de equipos militares defensivos, pero no le entregará las armas que reclaman con insistencia.
Al término de una reunión de más de seis horas del grupo de los once países Amigos de Siria, el secretario norteamericano de Estado, John Kerry, precisó que el montante de esta ayuda suplementaria será de 123 millones de dólares, y con ello el paquete total de la contribución de Estados Unidos a los rebeldes sirios llegará a los 250 millones de dólares.
“El presidente (Barack Obama) me ha pedido que aumenten nuestros esfuerzos”, declaró el titular de la diplomacia estadounidense en conferencia de prensa con su homólogo turco, Ahmet Davutoglu, y el jefe dimisionario de la Coalición Nacional de la oposición siria (CNS), Ahmad Moaz Al Jatib.
“Nos encontramos hoy en un momento crítico y es lo que nos ha traído aquí”, justificó Kerry ante la prensa. “Lo que está en juego en Siria no puede ser más claro: el uso de armas químicas, la masacre de la población con misiles balísticos y el recurso a otras armas de destrucción masiva”, detalló.
“Este conflicto desborda ahora las fronteras (de Siria) y amenaza a los países vecinos”, agregó Kerry, “este baño de sangre debe cesar”.
El comunicado del departamento precisa que la ayuda estadounidense se extenderá “más allá de las raciones alimentarias militares y de los kits de ayuda médica para incluir otros tipos de equipos no letales”, sin más detalles.
Antes de la reunión de Estambul, los medios de comunicación estadounidenses indicaron que este equipamiento podría incluir chalecos antibalas, vehículos y gafas de visión nocturna.
Kerry instó asimismo a los diez países occidentales y árabes del grupo de Amigos de Siria, a aumentar el importe de su ayuda a la oposición con el fin de llegar a un total de mil millones de dólares.