El secretario general de la OTAN, Anders Fogh Rasmussen, coincidió este jueves con las declaraciones del secretario de Defensa estadounidense, Robert Gates, que afirmó que la disminución de los gastos de defensa en los países miembros amenaza con “debilitar la Alianza”.

A menos que los europeos “pongan la mano en el bolsillo”, la disparidad de gastos destinados a la defensa amenaza con “debilitar nuestra Alianza” y crear “una alianza a dos niveles”, estimó Rasmussen en una entrevista al diario británico The Guardian publicada este jueves.

Gates estimó el miércoles que la disminución del presupuesto de defensa en los países miembros de la OTAN constituye un “problema grave” que corre el riesgo de alejar, a largo plazo, a Estados Unidos de la Alianza.

Rasmussen coincidió con la idea según la cual las diferencias en el financiamiento podría crear un abismo en las capacidades tecnológicas de Estados Unidos y la de los otros miembros de la Alianza dejando planear la duda sobre la cooperación futura.

El secretario general de la OTAN precisó en este contexto que hace diez años los gastos de Estados Unidos en la Alianza Atlántica representaban la mitad del total contra 75% actualmente.

“Un abismo económico cada vez mayor puede conducir asimismo a una mayor diferencia tecnológica que amenace con poner trabas a las capacidades operacionales de nuestras fuerzas”, dijo.

Según Rasmussen “los estadounidenses continúan proveyendo equipos militares más perfeccionados mientras que los europeos están lejos detrás”. “Podrá eventualmente ser más difícil cooperar incluso con la voluntad política de hacerlo”, agregó

A pesar de este problema sobre el financiamiento de los gastos, Rasmussen afirmó que la OTAN “está lista para continuar cuanto sea necesario para cumplir su misión” en Libia afirmando que el líder libio Muamar Gadafi puede caer en todo momento.