La cantante brasileña Loalwa Braz Vieira, intérprete del éxito mundial La Lambada, fue hallada carbonizada en su automóvil este jueves en Saquerema, en la región de Rio de Janeiro, en circunstancias todavía confusas pero que apuntan a un posible asesinato.

Los bomberos descubrieron el cuerpo de la exintegrante del grupo Kaoma, de 63 años, dentro de su vehículo incendiado en esta localidad costera a unos 100 km de Rio, donde regentaba un pequeño albergue para turistas.

“Sí, puedo confirmarlo”, declaró a la AFP un policía de la comisaría local al ser interrogado sobre el deceso, sin dar más precisiones.

Durante la noche, los agentes habían sido alertados de la presencia de dos hombres armados cerca del domicilio de la cantante, según adelantó el sitio de noticias G1, que habla de “informaciones preliminares” de la policía local.

Pero resulta aún precipitado establecer una relación formal con el deceso, de acuerdo con los investigadores citados por ese medio.

El cuerpo de bomberos recibió una llamada en la noche para acudir a apagar un incendio en la vivienda de Braz Vieira. En cuanto llegaron, una segunda comunicación les alertó de que había un coche ardiendo en las cercanías. El cuerpo carbonizado de la intérprete estaba en el interior.

15 millones de discos vendidos

En el transcurso del jueves se le practicará una autopsia para conocer las causas exactas de la muerte.

Loalwa Braz Vieira adquirió una fulgurante y efímera fama mundial en 1989 como vocalista del grupo Kaoma al lanzar el tema “Chorando se foi”, más conocido como “La Lambada”.

La lambada es en realidad un género musical que fusiona el carimbo, el merengue, la salsa y el zouk -un ritmo originario de las Antillas Francesas- del que Braz Vieira se convirtió en ícono brasileño en la década de 1980.

Este éxito internacional se dio a conocer junto a un videoclip colorido y sensual, donde una pareja de mestizos bailaban en la playa con un seductor movimiento de caderas, que contribuyó considerablemente a su éxito planetario.

“La Lambada” vendió 15 millones de ejemplares en más de 100 países, donde consiguió 80 discos de oro y de platino, así como centenares de premios en todo el mundo, según la página oficial de Loalwa Braz.

La cantante vivió varios años en Francia a partir de 1985, donde se instaló después de su éxito en un concierto celebrado en Palacio de los Deportes de París. Fue allí donde nació el grupo Kaoma, formado en su mayoría por músicos africanos y brasileños que ganarían la fama mundial con esta canción.

Atrapada por el éxito

“Es triste, era una mujer cariñosa, simpática, pero también frágil, que sufrió bastante y enfrentó muchas dificultades”, contó a la AFP Ricardo Vilas, un cantante brasileño exiliado en Francia durante la dictadura militar (1964-85) y que conoció a Loalwa en París.

“De repente, ganó mucho dinero y conquistó una fama mundial. No estaba preparada. Se metió en líos complicados con tipos raros que orbitaban en su entorno. Con el dinero de “La Lambada” podría haberse comprado un castillo, pero enseguida tuvo problemas con el fisco. Se había enamorado de un boxeador que le pegaba”, explicó el músico.

“Era una buena cantante, una verdadera voz”, recuerda todavía Vilas, quien quedó impresionado por su generosidad: en 1997, Loalwa aceptó cantar gratuitamente un fragmento de la canción “Samba y Fútbol”, que él mismo compuso y lanzó en Francia antes del Mundial de fútbol de 1998.

En Brasil, sin embargo, la cantante ya era conocida mucho antes de “La Lambada”.

Nacida en Rio de un padre director de una banda de música popular y de una madre pianista clásica, la intérprete comenzó su carrera con 13 años, orientándose hacia los sonidos del jazz.

Apreciada por las figuras sagradas de la música brasileña, grabó o compartió escenario con Gilberto Gil, Caetano Veloso, Tim Maia, Gal Costa o Maria Bethânia.

El éxito de “La Lambada”, sin embargo, también estuvo rodeado de polémica después de la acusación de plagio del grupo folclórico boliviano Los Kjarkas, quienes habían compuesto el tema “Llorando se fue” en 1981.

Antes de bailarse en medio mundo con la voz de Loalwa, la canción creada por los hermanos Hermosa había conquistado varios países latinoamericanos. Tras años de litigio con los productores franceses de la famosa versión, la justicia reconoció los derechos de Los Kjarkas.