¿Cuánto debe durar una relación sexual perfecta? Esta es una interrogante que probablemente más de alguno se ha realizado y que ha sido objeto de varios estudios.

Uno de ellos es el publicado por la revista científica Journal of Sexual Medicine, el que señala que la media es de 5,4 minutos. Lo anterior, sin contar los preliminares.

En tanto, otro estudio de la la Universidad Estatal de Pensilvania indica que una buena relación sexual debe durar entre 7 y 13 minutos. De esta forma, la que no alcanza a llegar a los dos es “demasiado corta” y la que se extiende por más de 10 se considera “larga”, según consignó el portal ABC.

El sexo no es solo números

La sexóloga Francisca Molero, directora del Institut de Sexología de Barcelona, explicó a La Vanguardia que el coito no tiene que ver solo con el tiempo de duración.

De hecho, aseguró que no existe un número estándar. “Varía según la persona. Una relación sexual gratificante puede durar desde cinco minutos hasta dos horas. Depende del momento, de la situación y la motivación”, afirmó.

En esta línea, Molero advirtió que incluso el sexo que dura mucho tiempo puede convertirse en una tarea monótona, afectando así el nivel de excitación de la pareja y además producir molestias.

“Te puedes acabar cansando y, si se perpetúa porque no acabas de llegar a la eyaculación, puede resultar poco agradable porque la pareja puede empezar a desconcentrarse”, comentó la sexóloga.

Pexels (CC)
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Nuria Jorba, también sexóloga, coincide con Molero y detalló que si bien muchas veces se piensa que la satisfacción sexual se obtiene con mayor tiempo, esta es una idea equivocada.

“Depende de los patrones que tenga cada pareja”, explicó la profesional, agregando que una relación sexual puede ser rápida y a la vez muy gratificante.

En este sentido, Jorba aconsejó enfocarse en la calidad del sexo, en vez de la cantidad y la duración. Y, en el caso que el tiempo sea una preocupación, la clave está en los preliminares.

Por último, para Francisca Molero, el sexo perfecto es aquel en el que “las dos personas están motivadas para dejarse llevar, descubrir, sorprenderse y compartir un momento de placer. Sin presiones, sin tener una meta”.