Los padres suelen soñar con tener a sus hijos con ellos tanto tiempo como sea posible. En Italia, una mujer descubrió que se debe tener cuidado con lo que se desea.

En un caso digno de la doctora Polo, una mujer llegó hasta los tribunales italianos para interponer una demanda en contra de dos de sus hijos, exigiendo que ambos abandonen el hogar materno de una vez por todas.

La en apariencia despiadada acción se vuelve mucho más comprensible cuando sabemos que la afectada es una adulta mayor de 72 años, y sus querubines, dos sujetos de ya 40 y 42 años.

La mujer, habitante de la norteña ciudad de Pavia, cercana a Milán, explicó a los jueces que ha intentado por todos los medios que sus hijos emprendan sus vidas independientes, sin obtener resultado.

Peor aún, se queja de que ella es la encargada de hacer todas las tareas del hogar sin recibir ayuda alguna por parte de ellos. Incluso, que ambos tienen trabajos que les reportan ingresos, pero no colaboran económicamente y esperan que su madre siga cocinando para ellos y lavando su ropa.

Caso cerrado: Los “niños” deben irse antes del 18 de diciembre

Atendidos los antecedentes, a la jueza Simona Caterbi no tardó mucho en fallar el caso y -quizá temiendo que en su momento le ocurra lo mismo, dictó una orden de desalojo en contra de ambos “niños” dándoles hasta el 18 de diciembre como plazo fatal para marcharse.

Según Caterbi, si bien los padres tienen una obligación de apoyar y proveer a sus hijos, cuando estos sobrepasan los 40 años ya no se justifica que lo requieran.

Es probable que esta demanda no sea la única en el futuro. Como reporta EuroNews, en Italia la edad promedio para independizarse es de 26 años, aunque es común que muchos de ellos permanezcan en casa de sus padres bien entrados los 30 años, sobre todo mientras no encuentran trabajo.

De acuerdo al Instituto Nacional de Estadísticas de Italia (ISTAT), más de 2 millones de italianos sobre los 30 años aún se mantienen en sus hogares paternos.