En el Día Mundial del Corazón, expertos en salud mental explican en que consiste el síndrome del corazón roto, una de las teorías que postulan los seguidores de la realeza como la verdadera causa del fallecimiento de la Reina Isabel II.
Esta jornada se dio a conocer el certificado de defunción de la Reina Isabel II, en el que se afirma que la monarca habría fallecido debido a su avanzada edad, no obstante, por el contrario, varios seguidores de la realeza han barajado la posibilidad de que la soberana habría fallecido por el “síndrome del corazón roto”.
Fue en abril del año pasado que su esposo, Felipe de Edimburgo, falleció a los 99 años, dando así por finalizada su historia de amor que perduró por 75 años.
Es precisamente este antecedente el que ha hecho a muchos suponer que lo que realmente provocó el fallecimiento de la Reina fue el extrañar a su marido, puesto que vieron su deceso con poco más de un año de diferencia.
¿A qué se le llama “síndrome del corazón roto”?
El síndrome de Takotsubo, también conocido como el síndrome del corazón roto, se define como una miocardiopatía aguda con la particularidad de reproducir síntomas idénticos a los de un infarto.
Esta patología es de cuidado y requiere atención inmediata, ya que se produce una insuficiencia cardiaca real. El cardiólogo de Clínica Dávila, Ángel Puentes, explica: “Se presenta sobre todo en mujeres de mayor edad y se considera una cardiopatía por estrés, dado que es el principal elemento desencadenante”.
¿Qué lo produce?
Las personas que desarrollan “síndrome del corazón roto” en general cuentan con antecedentes de riesgo cardiovascular como diabetes y obesidad, no obstante, quienes han sufrido recientemente un acontecimiento estresante, ya sea físico o psicológico, también pueden desarrollarlo.
En relación con los factores psicológicos desencadenantes de esta patología pueden ser malas noticias, discusiones, accidentes, pérdidas económicas, cambios de residencia, la muerte o enfermedad de un familiar. Es precisamente por estas últimas que varios hacen conjeturas sobre la razón del fallecimiento de la Reina.
Felipe Mora, psicólogo de Vidaintegra, explica que este síndrome se podría presentar más en mujeres que en los hombres, debido a que ellas cuentan con un pensamiento abstracto y ellos con un pensamiento lineal, es decir, enfrentan conflictos de forma más fácil.
“El pensamiento abstracto tiende a medir más variables, se consideran muchas variables y eso termina siendo abrumador en el contexto general (…) No deben hacerse cargo de todo. En los hogares tienden a ser jefas de familia, no por situación económica, sino porque administran el hogar”, detalla el experto.
Para prevenir este síndrome, el especialista explica que se deben manejar estructuras de límite claras en todas las áreas de la vida de una persona.
Respecto a las mujeres, señala que deben delegar, establecer rutinas sanas, dejar espacios personales del día o la semana en los que se realicen actividades satisfactorias y romper la rutina diaria, por ejemplo, con deporte o actividad física.
