A dos días del paso de un tornado en Puerto Varas, región de Los Lagos, habitantes del sector Villa Los Alpes -la zona cero de la emergencia- relatan cómo vivieron aquella jornada del domingo. Esto, mientras continúa en retiro de escombros.
En dicho sector, algunas viviendas resultaron completamente destruidas. En tanto, otros inmuebles se desplazaron más de 15 metros. Así lo cuenta José a Radio Bío Bío, quien advierte que materiales de construcción pudieron “haber atravesado a una persona (…) parecía que a la pared le pegó un balazo”, dice.
Al momento del tornado, que fue calificado grado 1 en la Escala de Fujita Mejorada (EF-1), cuenta el afectado, estaba cocinando con su hijo. “De la nada sale como un poco más de viento y lluvia”, relata.
Agregando “le digo que se entre a abrigar y, cuando entra, veo que cae un rayo, se desprende un árbol, atino a entrar a la casa, salir corriendo, vienen las cosas encima. Intento cerrar la puerta y no podía estar batallando con el viento”.
“Desde la reconstrucción que estamos haciendo, ayer un maestro descubrió que estaba incrustado en la pared -de esta casa- materiales de al frente. Parecía que a la pared le pegó un balazo. Eran materiales de otras construcciones, pedazos de piso flotante incrustados. Eso pudo haber atravesado a una persona”, dice José.
En diálogo con La Radio, el vecino de la zona cero también señala que “hay mucho que sacar las latas mucho que limpiar, mucho que trabajar y de verdad se agradece toda la ayuda que han dado, pero siento que avanzamos, avanzamos, avanzamos y nos vemos resultados”.
En la misma línea, Fernando, otro de los vecinos, narra que -por su trabajo- iba en viaje a Punta Arenas. “Me llegaron los mensajes. Primero, un amigo uruguayo saludándome y me dice del tornado y yo no tenía idea. Después empecé a ver fotos, videos, mensajes que me mandó mi familia, mi hija, mi sobrino, mis hermanos. Fue un shock de golpe”, dice.
En tanto, en su casa, “estaba prácticamente toda mi familia, estaban reunidos porque había un almuerzo familiar en aquel minuto y estaban todos compartiendo. De la nada, de repente, pasó esto. Se trataron de resguardar dentro. Uno de mis sobrinos dice que la puerta de su casa no la podía cerrar porque era tanto el viento que no era capaz de hacer la fuerza suficiente para cerrarla”.
Ahora, ya en Puerto Varas, Fernando dice que el plan inicial es arreglar las viviendas. “Dejarlas con techo, paredes y eso es lo primordial. Y después bueno, seguir con el desastre natural de todos los árboles que cayeron, los vehículos que están atrapados aquí entre medio de los pinos, eucaliptos”, cuenta.
“Ayer vino personal de la municipalidad, le dimos a conocer de que hay un canal que si sube puede correr el riesgo de derrumbe de tierra y es muy probable que caiga en la casa. Entonces quedaron en que hoy día iban a venir durante la mañana a hacer los estudios correspondientes y ver qué podemos hacer ahí (…) para que podamos contener la tierra que se puede llegar a derrumbar con el tema de la crecida del estero y ni Dios lo quiera, se nos vaya a la casa de mi hermano abajo y ya perdió todo el techo de su casa”, cierra.
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