Si tuviéramos que enumerar a las estrellas de Hollywood que en la cúspide de su carrera desaparecieron, seguro que tendríamos que emplear más de una mano para contar.

Hay algunos como el de la newyorquina Leelee Sobieski, estrella de Impacto Profundo o Jamás Besada que decidió abandonar en paz y tranquilidad Hollywood para dedicarse a lo que realmente quería, sin embargo, hay otros que no pueden entregar las mismas razones para desaparecer de la tierra de las estrellas.

Este es el caso de Brendan Fraser, el actor que a fines de los años 90 era el chico de oro de Hollywood protagonizando films como George de la Selva, Al diablo con el diablo o La Momia, que tuvo un retiro anticipado de la actuación en medio de graves situaciones asociadas a su salud como consecuencia de su trabajo y una situación de abuso de la que habría sido víctima.

La estrella de los 90

Trabajó incansablemente en la industria cinematográfica durante los años 90 y principios del milenio. Ya fuera como el apuesto George protagonizando George de la Selva (film donde también participó su esposa), o Rick O’Connell en La Momia, la trilogía que superó los 400 millones de dólares en ganancias.

Sin embargo, para cuando finalizó la franquicia que lo hizo aún más famoso, el actor ya no atraía la misma cantidad de fanáticos a las salas y su llama en Hollywood estaba cada día más apagada, algo que había comenzado luego de su participación en “Looney Toons: De nuevo en acción”.

Según destaca El Mundo, el multifacético actor, que no necesitaba dobles de acción para realizar sus atrevidas performances frente a la cámara, comenzó a sufrir una “fatiga de material” y fue su mismo cuerpo el que le pasó la cuenta.

El actor acumuló múltiples lesiones debido a su obsesión con protagonizar todas sus escenas, considerando que comenzó su carrera con un golpe que le pudo fracturar una costilla, mientras peleaba encarnando al “Marino 1” en el film “La última apuesta” que protagonizó River Phoenix y Lili Taylor.

El medio español señala las consecuencias de una carrera a prueba de todo: “Una lesión en un disco de la espina dorsal, una costilla rota, traumatismos en las rodillas y problemas en las cuerdas vocales, por no hablar de las muchas contusiones que sufrió”.

Luego añade las múltiples operaciones a las que se sometió Fraser, indicando que “durante siete años se sometió a varias operaciones, entre ellas una laminectomía, que es una cirugía diseñada para aliviar la presión sobre la columna vertebral, varias intervenciones más en la espalda y una operación de reemplazo de la rodilla”.

En entrevista con la revista GQ, el actor comentó: “Destruí mi cuerpo haciendo escenas de riesgo” añadiendo que “cuando hice la tercera película de La Momia (en 2008) me envolvían con hielo y cinta. Me hacía un exoesqueleto todos los días”.

Esta situación hizo que comenzara a tomar un ritmo más lento en su carrera, así como también que se desencadenaran situaciones que mermarían aún más en el ánimo del actor.

Un divorcio que duró tres años

En 1993, Brendan Fraser comenzaba su carrera en Hollywood, participando de producciones como “Twenty Bucks” o “Younger and Younger”.

En medio de esta vorágine participó de una fiesta que se celebró en la casa de la actriz Winona Ryder y fue aquí donde se flechó por quien resultó ser la mujer más importante de su vida durante más de una década, la actriz Afton Smith.

Junto a la actriz, que también participó con un papel secundario en George de la Selva, mantuvo una relación durante 4 años para casarse en 1998.

Luego, tuvieron tres hijos, que nacieron en medio de la mejor época del actor como estrella de la industria cinematográfica, Griffin (2002), Holden (2004) y Leland (2006).

Sin embargo, en 2007 la pareja anunció su divorcio tras 9 años de matrimonio, declarando que querían mantener una buena relación en post del bienestar de sus pequeños, destacó Hola, aunque lo que se sucedería después se alejó bastante de los deseos de la pareja.

El proceso de divorcio duró 3 años, en los que Smith le solicitó 90 mil dólares mensuales para la manutención de sus pequeños, sin embargo el actor aseguró que sus ingresos no superaban los 3 millones de dólares anuales y ya gastaba 87 mil dólares en tratamientos médicos debido a sus múltiples lesiones.

Según consignó Infobae, Fraser también argumentó que aunque gastaba 112 mil dólares en sus representantes, conseguía esporádicos empleos que no cooperaban para tener ingresos como los que ostentó en su época de oro.

El juez decidió que sólo tendría que entregar 50 mil dolares mensuales a su ex pareja para poder cumplir con sus obligaciones como padre, mientras que su carrera no lograba repuntar.

La entrevista que reveló su verdad

Para 2010 la carrera de Fraser ya estaba en baja, no era parte de los films que durante esos años agotaban la taquilla. Además, vinieron situaciones que no ayudaron en nada a levantar la imagen del actor, como cuando se transformó en “meme” tras reír de un chiste de Robert De Niro, lo que para muchos resultó humillante.

Además, en 2016 el actor concedió una entrevista para AOL, que fue publicada en Youtube, donde se le vio encorvado y casi susurrando al micrófono con un comportamiento que denotaba no entender el formato en el que estaba participando, lo que lo hizo viral y parte de la conversación luego de años, destacó Vanity Fair.

Sin embargo, la revelación más fuerte vino en una extensa entrevista que el actor dio a la revista GQ, donde comentó la agresión sexual que sufrió en el verano del 2003 por parte de una importante personalidad de Hollywood y que coincide con su alejamiento de las grandes producciones de la industria cinematográfica.

Se trata de quien oficiaba como presidente de la Asociación de la Prensa Extranjera de Hollywood (HFPA, por sus siglas en inglés), Philip Berk, el que habría atacado sexualmente al actor cuando se presentaba en un almuerzo que organizó la asociación que entrega los Globos de Oro.

El actor describió la situación de la siguiente forma: “Su mano izquierda hace un rodeo, me coge la nalga y uno de sus dedos me toca en el perineo. Y lo empieza a mover por ahí”.

“Me sentí enfermo, como un niño pequeño, como si tuviera una bola en la garganta. Creí que me iba a poner a llorar, […] como si alguien me hubiera tirado pintura invisible por encima”, añadió, revelando que salió de inmediato del lugar.

Vanify Fair destacó que el actor confesó que la violenta situación lo persiguió por años y había cambiado la forma en que se veía a si mismo. “En mi cabeza, por lo menos, había algo que me habían robado […] El teléfono deja de sonar en tu carrera y te empiezas a preguntar por qué. Hay muchas razones, ¿pero fue esta una de ellas? Yo creo que sí”, indicó.

Por su parte, Philip Berk aseguró que Fraser inventó la historia, destacando en una comunicado enviado a GQ que “la versión del Sr. Fraser es una completa fabricación”, dejando plasmada la situación en un libro de memorias, donde asegura que esto fue más bien como una anécdota que había vivido con el actor.

En cuanto a la HFPA indicó que no tenía conocimiento de esta situación, destacó El País, sin embargo, obligaron a que Berk se disculpara, aunque sólo se limitó a indicar que si había hecho algo que disgustó a Fraser, no había sido su intención hacerlo y por eso se excusaba.

Brendan Fraser vuelve al cine

2021 no ha comenzado mal para Brendan Fraser, pese a estar alejado del cine y sobre todo de los papeles protagónicos, se prepara que enfrentar un nuevo film que lo tendrá a él en el papel principal.

Se trata de la nueva película del director Darren Aronofsky, conocido por grandes producciones como “Requiem por un Sueño”, “Pi” y “Mother”. El film se basará en la obra de teatro de Samuel D. Hunter, “The Whale”.

La historia trata sobre un profesor de literatura online que sufre obesidad mórbida pesando más de 250 kilos y pasando su día a día en su sofá, mientras intenta recuperar su relación con su hija, destacó La Vanguardia.

El papel es un desafío para el actor que ya ganó unos kilos extra en su exilio de las grandes producciones, pero que ahora se enfrentará a un cambio drástico en pos de lograr realizar un buen trabajo en su vuelta a la pantalla grande.

Aunque aún no se revela el nombre de la película, ni su fecha de estreno, si se presume que lo acompañarán en el elenco Ty Simpkins, Samantha Morton y Sadie Sink, una de las estrellas de Stranger Things, destacó Deadline.