Las estrellas de la música aprovecharon la alfombra roja de los premios Grammy para llevar sus espectaculares atuendos, y llamar la atención de los gráficos, en una espectacular jornada.

Entre las que más llamó la atención fue Beyoncé, una de las favoritas de la noche con seis nominaciones, quien llevó un vestido negro traslúcido y largo de Proenza Schouler con un glorioso escote en V y mangas largas.

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Pero la reina del R&B no fue la única que osó ser generosa con su escote. La rapera Nicki Minaj, que busca dos premios, no dejó casi nada a la imaginación con su vestido negro Tom Ford cortado hasta el ombligo en una ancha V.

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Otras que brillaron en la alfombra roja de Los Grammy

Los vestidos que a menos de una hora de aparecer en la alfombra roja ya hacían las delicias en las redes sociales fueron los de la estrella de telerrealidad Kim Kardashian –esposa del rapero Kanye West– y el de la cantante de R&B Rihanna.

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Kardashian se enfundó en un vestido de Jean Paul Gaultier que parecía remedar una bata de baño, pero en una versión de lujo: largo y dorado, se abría al frente con un escote hasta el ombligo.

Rihanna llevó un vestido rosa largo de Giambattista Valli, con un talle apenas debajo del pecho y una falda muy amplia y larga de princesa en dos capas.

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La princesa del pop Katy Perry, con renovada popularidad gracias a su exitoso show en el entretiempo del Super Bowl, lució espléndida con un vestido blanco plateado de Zuhair Murad con decoraciones en cristal. Y cabello púrpura.

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Los Grammys han sido escenario de grandes momentos de la moda durante sus alfombras rojas. Uno de los más recordados es aquel vestido verde prácticamente inexistente de Versace que lució Jennifer Lopez en el año 2000.