El Gobierno dará a conocer este sábado el informe de reconstrucción en Iquique. Mientras que en Alto Hospicio, a fin de mes comenzará el traslado de las familias a las viviendas de emergencia.
Más de cincuenta edificios ubicados en la dunas de Iquique deberán ser demolidos por presentar daños estructurales irreparables, luego del terremoto de 8,2 grados en la escala de Richter que afectó al norte el pasado 1 de abril.
Es el caso más extremo que contiene el catastro de viviendas dañadas que entregó el jueves la Dirección de Obras de la Municipalidad de Iquique al intendente de Tarapacá, Michel Cartes y al encargado de Reconstrucción del Gobierno, Julio Ruiz.
Éstos a su vez darán a conocer el sábado el informe a la población, según confirmó el alcalde de la comuna, Jorge Soria.
En Alto Hospicio, la situación no es muy alentadora. El alcalde Ramón Galleguillos detalló que en total existen 270 viviendas con daños estructurales severos, 3.500 con daños menores pero en condiciones de habitabilidad, y 900 damnificados que están viviendo en las calles, distribuidos en un total de cinco campamentos.
Además, a fin de mes 144 familias serán trasladadas a las viviendas de emergencia construidas por el Gobierno en dos hectáreas donadas por el complejo deportivo Canadelas. En total se levantarán 270 hogares de 19 metros cuadrados cada uno.
La entrega de ayuda continúa. Todos los días el municipio reparte víveres y elementos de primera necesidad a grupos familares de cuatro integrantes, provee de agua a los campamentos a través de camiones aljibe y suministra servicio eléctrico mediante generadores.
Pero frente a la necesidad que tiene la población de apoyo psicosocial, el alcalde de Alto Hospicio solicitó al Gobierno el envío de cinco contenedores, para ser habilitados como consultas gratuitas de profesionales como asistentes sociales, sicólogos y abogados.
