El papa Francisco recibió el miércoles a delegaciones de la AS Roma y el Lazio, los dos equipos archirrivales de Roma, que el domingo disputarán la final de la Copa de Italia en un partido que tiene en vilo a los aficionados del fútbol y a las fuerzas de seguridad.

Los dos capitanes, Francesco Totti (Roma) y Gonzalo Ledesma (Lazio), de origen argentino cono el Papa, encabezaban las comitivas.

Las dos delegaciones ofrecieron al pontífice una camiseta de sus clubes, con el numero 1 y la inscripción “Papa Francesco” en la espalda.

La Roma y el Lazio disputarán por primera vez la final de la Copa de Italia, en un partido que preocupa por la fuerte animosidad entre los tifosi de ambos equipos.