En una ceremonia privada realizada en el Parque del Recuerdo de la capital, son despedidos los restos de Andrea Loi, una de las chilenas fallecidas en el terremoto que afectó a Haití la semana pasada y que ya deja más de 100 mil muertos confirmados.
El cuerpo de la malograda mujer llegó ayer proveniente de Haití, junto a 106 personas y 6 perros detectores de cuerpos de la PDI, sumado a 34 haitianos, quienes fueron autorizados por el Ministerio Público a entrar al país, entre ellos, el padre del futbolista Jean Beausejour.
Andrea Loi, de 44 años, soltera y sin hijos, trabajaba en la Misión de Estabilización de Naciones Unidas en Haití cuando ocurrió el terremoto de 7 grados en la escala de Richter que sacudió violentamente la capital haitiana, Puerto Príncipe, y donde murieron miles de personas.
Esta mañana, por su parte, llegó el cuerpo de María Teresa Dowling, la otra fallecida en la tragedia que sacudió al país más pobre de América.