La primera parte de la intervención consideró la extirpación de un tumor de gran tamaño ubicado en la zona del pecho. El tejido tumoral pesó 4 kilos 200 gramos.

11 horas y más de 20 funcionarios se necesitaron para realizar una compleja cirugía en el Hospital Regional de Antofagasta. Incluso, previamente, recintos médicos de Coquimbo y Santiago declinaron recibir al paciente.

La primera parte de la intervención consideró la extirpación de un tumor de gran tamaño ubicado en la zona del pecho. El tejido tumoral pesó 4 kilos 200 gramos. El término técnico del procedimiento fue de resección de sarcoma toraboabdominal, con resección (extirpación) de costillas.

Para esta intervención se necesitaron más de 20 funcionarios dentro del pabellón, entre ellos: cirujanos, arsenaleras, enfermeras, anestesistas y auxiliares de anestesia.

11 horas y más de 20 funcionarios para compleja cirugía

Pero este fue solo el comienzo de la operación, porque los profesionales debieron remover tres tumores más, uno en la zona pleural derecha, otro en el pulmón y el último alojado en la región suprarrenal.

Sin embargo, no todo fue en materia de extirpación, porque el paciente también requirió una colecistectomia por litiasis, es decir, la remoción de su vesícula.

Luego de esto, comenzó el proceso de reconstrucción de todas las partes del cuerpo removidas o abiertas por el bisturí.

En el caso de esta intervención, los médicos debieron sustituir las costillas extirpadas con implantes, técnica conocida como reconstrucción costal con Stratos. A ello debieron sumar la reconstrucción del diafragma y la pared abdominal con malla Symbotex.

En las últimas horas de la intervención, los cirujanos plásticos tuvieron que reingresar al pabellón, luego de haber participado al inicio de la resección del tumor principal. La tarea fue sacar tejido de un músculo de la espalda del paciente y usarlo como una verdadera venda o parche sobre el área del pecho donde estuvo el sarcoma extirpado.

La expresión médica para este procedimiento es cobertura toracoabdominal con colgajo músculo cutáneo de dorsal ancho y colgajo fasciocutáneo de avance abdominal.

“Cirugía de alta complejidad”

Para el jefe del servicio de cirugía del Hospital Regional de Antofagasta, Jorge Cifuentes, operaciones como estas reflejan el porqué es este recinto el principal centro de derivación de patologías de alta complejidad de la Macrozona Norte, que abarca desde Arica hasta Copiapó.

“En este contexto, el servicio de cirugía de este hospital ha implementado polos de desarrollos en las diferentes subespecialidades quirúrgicas con el objeto de entregar a nuestros usuarios una resolución de sus patologías quirúrgicas al más alto nivel, no solo de la Macrozona Norte, sino que a nivel del país”, destacó el jefe de cirugía.

“Esta progresión nos ha permitido avanzar en nuestro quehacer quirúrgico, siendo esto refrendado por una cirugía de alta complejidad en un paciente que no tuvo solución a su patología en otros centros quirúrgicos y que el servicio en pleno discutió y analizó, tomando la decisión de intervenirlo de manera multidisciplinaria en donde participaron las especialidades de Urología, cirugía de tórax, cirugía vascular, cirugía digestiva y cirugía plástica, sumado a esto el resto del equipo de salud, que incluyó a anestesistas, técnicos paramédicos, enfermeras y auxiliares de servicio de pabellón, como también la participación de la unidad de paciente crítico, todos con una participación activa que permitió llegar a buen término en la solución de este paciente”, detalló el profesional.

Finalmente, el Dr. Cifuentes quiso destacar a uno de los tantos médicos que intervinieron en el proceso, por su especial dedicación al caso, desde sus inicios. “Quisiera resaltar la especial participación en la resolución de este caso fue la del Dr. Paulo Pereira, cirujano de tórax, quien se hizo cargo del paciente desde el inicio de su manejo”, concluyó.