El lunes, la Justicia decidió condenar al ingeniero comercial, autodenominado economista y exfigura televisiva, Rafael Garay, por 29 delitos de estafa, ilícitos con los cuales defraudó un monto cercano a los 1.300 millones de pesos y por los que el Ministerio Público pide seis años de cárcel.
Dos de los afectados son el periodista de CHV, Iván Núñez; y su esposa, Marlene de la Fuente; quien en conversación con Canal 13 dijo dudar que el acusado haya gastado lo defraudado y señaló creer que, a su juicio, Garay debe tener el dinero enterrado.
“Mi impresión es… yo creo que él enterró la plata”, indicó. “Como él cree, y así lo dijo, que esto va a ser rápido (…), si le dan seis años, lleva dos, va a pagar cuatro, luego va a tener buena conducta, va a salir al año, va a pescar su dinero y se va a ir”, añadió de la Fuente.
Según indicó, de todo el tiempo que ha conocido a Garay, los últimos dos años previo a su escape comenzó a llevar un estilo de vida más lujoso. “No fue que toda la vida haya gastado grandes cantidades”, agregó.
En la audiencia, Garay dedicó palabras para los afectados por su actuar, discurso que la víctima tildó de “demasiado preparado”, añadiendo que en realidad busca “engañar a la opinión pública”.
“Él insiste que es alcohólico, él insiste que por el alcohol él hizo esto (…). O sea perdóname, si por el alcohol todos hiciéramos esto, o sea qué esperamos que fuera la vida”, disparó de la Fuente.
En conversación con el medio, también criticó su falta de empatía con quienes sufren de cáncer, enfermedad que aseguró padecer tras ingresar a una siniestrada planta nuclear de Japón.
“No sólo decía que tenía cáncer, sino que se golpeaba, vomitaba, tiraba espuma. Este señor no es normal, es un peligro para la sociedad”, sentenció.
En línea con lo anterior, de la Fuente aseveró estar ansiosa a la espera de la sentencia que recibirá Garay y vislumbró su eventual futuro.
En relación a su discurso, donde se disculpó por su actuar y solicitó el perdón de quienes sufren de cáncer, de la Fuente aseguró que su objetivo es optar a un beneficio extracarcelario y -a futuro- dar charlas motivacionales.
“Probablemente va a hacer una película, eso es lo que debe querer”, indicó.
