Camila Couve revive el proceso de creación de "Estampas de Niña"

“En la infancia antigua, esa que ocurrió allá tan lejos que me parece una imagen representando algo que me contaron, se ve a una niña. Debo ser yo”.

Con esta frase Camila Couve da la partida a su libro “Estampas de Niña”, el primero que se decide a editar, aunque ha escrito siempre.

Sus relatos —que evidencian una pluma tan rica como sencilla— son 67 “estampas” de su propia infancia: por ahí pasan las muñecas ansiadas, los vestidos que no le gustan, las peleas de sus padres, la estufa redonda negra a parafina, las tortitas de barro con que se jugaba en el jardín de cualquier casa.

Ahora Camila tiene su propia familia y por uno de sus hijos —que nació con un retraso en su desarrollo motor— creó el colegio “Alamiro”.

El nombre lo tomó del primer libro de su padre, el venerado pintor y escritor Adolfo Couve (trágicamente fallecido en Cartagena en 1998).

La portada de “Estampas de Niña” es una intervención sobre óleo de Marta Carrasco, su también famosa madre, ilustradora y escritora de libros infantiles.

De ello, su formación y su proceso creativo conversó con “Del Fin del Mundo” de TV BioBio con Ana Josefa Silva, Marco Antonio de la Parra y María José Navia.