Alexandra von Hummel, directora: "La Mantis Religiosa habla de salir del encierro y de la libertad"

Por Leopoldo Pulgar Ibarra

El dramaturgo Alejandro Sieveking (1934-2020) utiliza la figura de la mantis religiosa para contar la historia de cuatro hermanas que viven en un caserón con su padre enfermo. La mantis es un insecto alargado con grandes ojos y patas largas y robustas, recogidas como en actitud de rezar, con fuertes espinas para atrapar las presas con que se alimenta,

Todo allí es extraño. Las dos mayores mataron a sus pretendientes, mientras que la tercera invitó a su novio a la casa, un hombre que siente curiosidad por conocer al “monstruo” en que, según dicen de ella, se convirtió la hermana menor, Teresa, encerrada en su cuarto.

Todo un misterio, porque también se comenta que quien logre verla vivirá una conmoción de tal magnitud que llevará a que la novia tenga que matarlo también. Así se presentó la obra en su estreno, en 1971. Ahora, este importante título del teatro chileno vuelve al escenario, cincuenta y cuatro años después, con una mirada contemporánea.

Un relato al interior de una casa con varias puertas, con alguien siempre espiando a otra persona, en un ambiente sin privacidad y asfixiantes relaciones familiares.

“La única manera de ser fiel a un texto, es ser fiel a la lectura que uno hace”, afirma la directora Alexandra von Hummel.

Terreno ambiguo

¿La propuesta para dirigir “La Mantis Religiosa incluía algún tipo de enfoque?

“No, no me pusieron ningún lineamiento. La idea era montar esta obra de Alejandro Sieveking y siempre uno la lee desde el contexto en que se vive”.

Este texto relaciona la vida provinciana y un elemento extraño, más sobrenatural…

“Para mí, esta obra tiene un secreto, un gran secreto, no algo sobrenatural. Son tres hermanas que tienen una cuarta que está escondida, por alguna razón que nunca conocemos muy bien. Ellas se refieren a esta cuarta hermana como monstruosa, pero el padre la encuentra maravillosa.

“En realidad, esto está en un terreno ambiguo ¿quién es esta hermana y por qué la tienen encerrada? Nunca se dice mucho por qué pasa esto. A mí lo que más me interesó no fue quién es ni cómo es, sino el espacio donde se esconde algo cuando uno tiene un secreto, y cómo eso afecta el vivir.

“Cómo un secreto, de alguna manera, secreta por algún lado y te afecta y te hace comportar de cierta forma y te reprime de alguna manera. Las hermanas tienen a esta mujer encerrada, un secreto que les ha pesado toda la vida”.

Pero ¿es una presencia fuera de lo común?

“Yo la veo como algo súper concreto, sólo que está en el terreno de lo ambiguo. Para mí, tiene que ver con esta vida provinciana, con la moral que las hermanas levantan o que existe en cualquier lugar: una moral que constriñe.

“Es una casa muy asfixiante, donde todos saben de esta presencia, que para mí es muy concreta. De alguna manera, la hermana encerrada representa lo diferente, lo distinto, lo que nos da terror mirar, aceptar…”

Lo diverso frente a una visión conservadora…

“Diversa, sí, diversa y ambigua, que no puede ser encasillada. Eso es mucho más difícil. Cuando tú sabes qué es lo distinto, es más fácil relacionarse. Cuando no eres capaz de nombrar lo distinto, eso provoca mucha incomodidad, terror… Es lo innombrable”.

Salir del encierro

La obra muestra afectos de mujeres en relación con los hombres, búsqueda del amor ¿Hay una visión machista en el original?

“Esta obra se estrenó en 1971, una época donde las mujeres pensaban que solo casadas podían salir de su casa. Hoy eso no es así. Pero, de todas formas, más allá del deseo y de lo que le pasa a estas mujeres con los hombres, la obra alude a la posibilidad de salir del encierro, de vivir otras posibilidades.

“Como en el texto original, estas mujeres derrochan deseo, pero yo creo que más que deseo por un hombre en particular, es por la posibilidad de salir. El deseo es salir de este lugar, tener libertad…”

En ese sentido, la hermana encerrada puede ser imaginada como una mujer, no un monstruo…

“Claro. Y como está en el terreno de lo ambiguo, tomamos la opción de no mostrarla. Ella no se ve. Sólo se siente su presencia y sabemos de ella por lo que los otros dicen. Y por el efecto que tiene sobre ellos. Todos hablan de ella de manera diversa y distinta. A mí me parece que es súper atractivo ese terreno”.

Algo se abre

El tema de la muerte y lo afectivo también es importante…

“Sí, está por historia. Dos de las tres hermanas ya tuvieron un novio, que asesinaron en el momento en que estos novios entraron y vieron a Teresa, la hermana encerrada. Lloran maravillados por ella. Se vuelven locos ante el secreto que se guardaba”.

¿Que los hombres queden en shock al verla equivale a no entender una nueva realidad?

“Para mí es la posibilidad de algo distinto: una presencia maravillosa que les cambia la vida, según el testimonio de los hombres que la han visto. Lo que pasa es que ese cambio de vida va totalmente en contra de la vida que las hermanas tenían planeada. Pero cuando ellos ven a esta mujer, quieren otra cosa: la posibilidad de vivir de otra manera, como que se colara otra moral, otra posibilidad de mirar el mundo”.

¿Frente a la cual quedan en shock?

“Sí, pero creo que ellos la entienden. Lo que pasa es que en el fondo ellas ocultan algo que no corresponde a su deber ser. Es una mujer que no responde al deber ser de sus hermanas… Pienso que los hombres sí la entienden y sí quieren quedarse con ella. Sin embargo, son las hermanas quienes no hacen esta diferencia. Hay algo conservador que no quiere que haya cambios”.

En 1971 se estrenó “La mantis…”. Coincide con una época cuando algo estaba abriéndose en Chile…

“Sí, claro. Representa una posibilidad de algo que está siendo coartado por un pensamiento conservador. Sin embargo, los hombres que logran ver a esta mujer quedan obnubilados. Y esa posibilidad no tiene que ver con que sea linda, fea o monstruosa.

“Creo que tiene que ver con mirar a alguien o mirar una posibilidad de un pensar distinto, de una libertad distinta, de algo que jamás habrían pensado. Hay un texto al final de la obra donde Juan, el pretendiente, sale después de ver a la Mantis y dice: Yo vivía sin ver el mundo y luego de verla me di cuenta que yo vivía como una planta”.

“Es algo que no tiene que ver con un deseo físico, es un deseo mucho más global, con la posibilidad de vivir de otra manera. Es como un despertar. Un despertar desde el cual no hay vuelta atrás”.

La Mantis Religiosa

Dramaturgia: Alejandro Sieveking
Dirección Alexandra Von HummeL
Elenco: Tamara Acosta, Verónica Medel, Thais Zúñiga, Manuel Peña, Luciano Reinoso
Diseño escenografía y vestuario Laurene Lemaitre
Diseño iluminación Gloria Allendes
Composición escénica: Elías Cohen
Música: Mario Avillo
Caracterizadora: Margarita Nilo
Asistente dirección Melchor Pino
Financia: Línea de Apoyo a Teatros Universitarios del Mincap
Producción: Teatro UC

Teatro UC.
Sala Eugenio Dittborn.
Jorge Washington 26, Ñuñoa.
Miércoles a sábado, 20.00 horas.
Entradas: Ticketplus y boletería.
Informaciones: lalveac@uc.cl
14 agosto al 13 septiembre 2025.