El documental Nidal, de Josefina Pérez-García y Felipe Sigala, va mostrando desde el movimiento constante de la arena de las dunas movida por el viento, una pareja de búhos, a la verdadera invasión de torres de departamentos.
Las torres, claro, requieren realizar grandes movimientos de tierra destruyendo entornos naturales. Y luego están las industrias y su contaminación. Las personas que hacen “motocross” y “rally” en las dunas. Y la basura y muchos y más.
La situación de las dunas de Concón no es nuevo. Hace décadas se vienen haciendo denuncias por parte de ecologistas, de arquitectos y urbanistas. Incluso de parte de diversas autoridades. Se ha mostrado y probado que en ellas habita (o habitada) mucha vida endémica, incluyendo gran cantidad de pequeñas plantas e insectos que se habían adaptado a ese medio específico.
La lucha, por supuesto, era y es contra importantes inmobiliarias y sus grandes redes de influencia, con políticos de casi todos los sectores.
Lo nuevo de Nidal
El documental es un largometraje audiovisual donde va mostrando el medioambiente natural y su biodiversidad -con bellas imágenes- contrastadas con las faenas de las constructoras, la vida que se ha ido instalando en la gran cantidad de torres de departamentos, los deportes “tuerca” que se realizan en las dunas, entre otros.
Son secuencias -intencionadas- para mostrar diversas actividades humanas que deterioran y destruyen un entorno hermoso, valioso en su biodiversidad.
“Una película documental experimental, poética, contemplativa”
(Josefina Pérez-García)
“Como se trata de un fenómeno real, preocupante y urgente, sentimos la imperativa necesidad de que la película fuese documental”, afirmó el codirector Felipe Sigala.
“Una ficción no habría podido vislumbrar la crudeza del suceso, ni su belleza atípica. Siempre trabajamos bajo la premisa de que debíamos inferir lo menos posible en lo que ocurriese dentro del plano, pues son los seres humanos los responsables de que sucedan estos procesos de transformación. La única intervención nuestra fue el encuadre de la cámara y la sucesión de planos, y la forma cinematográfica que permite esto es el documental”, dijo Sigala.
“Creo que el guion inicial, previo al rodaje, estaba escrito desde la nostalgia. Nos costó mucho entender que el espacio ya no se comportaría como se comportaba décadas atrás, lo que significaba buscar otra forma de articular la película. Emocionalmente implicaba reconocer que el lugar de la infancia ya no existía, fue el proceso más duro y el que nos obligó a redirigir la película y permitirnos ir armando el relato a medida que íbamos redescubriendo este espacio y cómo este se habitaba”, complementa Josefina Pérez-García, codirectora.
Documental para sentir y pensar
El documental tiene varias virtudes. La belleza de sus imágenes, promover a las y los espectadores a sacar sus propias conclusiones, estimular la observación consciente e, indirectamente, invitar a cuestionarse diversas prácticas y conductas. Muchas de ellas normalizadas.
Nidal, de Josefina Pérez-García y Felipe Sigala, tuvo su estreno mundial en el Festival Internacional de Cine de Thessaloniki.
Nidal es el primer largometraje documental de la Carrera de Cine de la Universidad del Desarrollo. Es el resultado de casi 3 años de trabajo y su resultado la película de egreso de sus realizadores.
El documental estará desde el 22 de junio en salas de Santiago y regiones.
Nidal
Idea original: Matías Zúñiga.
Dirección: Josefina Pérez-García y Felipe Sigala.
Dirección de fotografía: César Rivas.
Edición: Josefina Pérez-García.
Producción: Josefina Pérez-García y Felipe Sigala.
Casa Productora: Cine UDD
Duración: 61 minutos
