Luego de que 2 investigadores encendieran la polémica la semana pasada al revelar que el iPhone 4 almacena la ubicación precisa de sus usuarios en un archivo sin protección, la empresa salió al paso de las críticas de la forma más inesperada: un correo electrónico informal de su CEO, Steve Jobs.

Jobs, quien tiene por costumbre responder aleatoriamente algunas de las preguntas que se le escriben a la casilla sjobs@apple.com, recibió la consulta de un lector del conocido foro MacRumors.com, cuyos administradores reprodujeron en el sitio web:

Steve,

¿Podrías explicar cuál es la necesidad de tener en mi iPhone una herramienta que registre silenciosamente mi ubicación? Es bastante enervante saber que mi ubicación exacta está siendo grabada todo el tiempo. Quizá tú puedas iluminarme un poco al respecto antes de que me cambie a Android (de Google). Al menos ellos no me registran.

A cambio, recibió una (también acostumbrada) escueta respuesta del fundador de Apple:

Oh, vaya que sí lo hacen (en referencia a Google). Nosotros no registramos a nadie. La información que circula al respecto es falsa.

Enviado desde mi iPhone

La respuesta no provee ningún tipo de detalles más allá de las propias afirmaciones de Jobs, que contrastan con la evidencia encontrada por Alasdair Allan y Pete Warden de un archivo llamado “consolidated.db”, que además de almacenar los movimientos del usuario, queda desprotegido en cualquier computador usado para sincronizar con el teléfono.

Según explica MacRumors basado en información del Wall Street Journal, si bien el sistema Android de Google también registra los movimientos de sus usuarios, este es un listado mucho más pequeño, además de ser eliminado regularmente.

Por el contrario, aún cuando el iPhone 4 es devuelto a su configuración de fábrica y se apagan todos los servicios de rastreo -que vienen activados por defecto- el teléfono sigue almacenando ubicaciones, principalmente mediante triangulación con las torres de telefonía celular.