Uno de cada diez exámenes de laboratorio practicados en Clínica Las Condes para detectar distintos virus como el sida o la hepatitis, podrían tener problemas de precisión y de detección de las cargas virales, según una denuncia efectuada por la doctora Paula Piamonte, microbióloga que alcanzó a trabajar 10 años en ese establecimiento de salud como médico consultor del departamento a cargo de los análisis.

El ahorro en los productos -en particular de reactivos- sería una de las causas de las irregularidades. Además, habrían errores que afectaron a unos 8 pacientes, a quienes se debió haber repetido los exámenes. Según la denuncia de la especialista, los pacientes fueron informados con resultados imprecisos.

Los antecedentes podrían haber provocado que un número indeterminado de pacientes podría -por ejemplo- tener VIH en su organismo, y haber sido informado que no lo tenía.

En conversación con La Radio, Piamonte afirmó haber dado a conocer dichas irregularidades a sus superiores, incluso a la gerencia de la clínica, pero estas fueron desestimadas.

La médico, que fue despedida bajo el argumento de “necesidades de la empresa”, inició una demanda laboral en contra de la clínica, en que detalla parte de las supuestas irregularidades, según lo relató su abogado, Pedro Herrera.

Las acusaciones fueron desestimadas al interior del recinto de salud, que a través de un comunicado indicó que “dada la gravedad e implicancias de las acusaciones de la doctora, estas fueron revisadas exhaustivamente en tres auditorias, internas y externas, las que determinaron que los resultados entregados por el laboratorio son válidos”.

Cabe destacar que a la causa laboral impulsada por la médico se suma una demanda de similares características que presentó un segundo trabajador de la clínica, quien aún trabaja en el recinto.