En una carrera contra el tiempo está la familia de una niña de 5 años de Los Ángeles, que tiene un tumor cerebral y otro en la columna que amenazan su vida, por lo que necesitan una costosa droga que permita mejorar el efecto de la radioterapia, lo que se suma a una deuda hospitalaria millonaria.
Una recaída del tumor cerebral, con el luchó cuando tenía menos de 3 años, tiene a Valentina nuevamente internada, ahora en la UCI pediátrica de la Clínica Sanatorio Alemán de Concepción.
Ella ríe y juega con su hermana menor, pero se da cuenta de que algo no está bien. No puede caminar, porque el tumor en la columna avanza rápido y no es posible realizar una cirugía, donde la posibilidad de sobrevida es baja.
El tratamiento es radioterapia y quimioterapia. Junto a ello necesitan un medicamento llamado Temodal. Sólo 5 tabletas tienen un costo cercano al millón de pesos, comentó Manuel Muñoz, papá de Valentina. Una droga que estaría disponible este miércoles.
Esta familia quiere ganar tiempo. “Hace una semana le dieron tres semanas de vida. Si no iniciamos ese tratamiento, no tenemos muchas opciones. Necesitamos juntar las lucas para comprar esta droga si la clínica no la puede conseguir”, dijo Muñoz.
Su deseo es reunir 40 millones de pesos y llevar a esta pequeña a Estados Unidos o España.
Acumulan deudas millonarias, decenas de pagarés y un juicio con la isapre Consalud por el primer tratamiento que enfrentó Valentina, sumando otra preocupación a la familia. También tienen una deuda con un anestesista, lo que les trajo más problemas, recordó la mamá de Valentina, Ana María Bravo.
“Estamos con mi niñita, mi hija, en riesgo vital. No importa si se le adeuda. Yo creo que eso no puede ser impedimiento para que en una situación como esta él venga. Si lo está pidiendo el equipo médico que asista a Valentina en la radioterapia, no debería haber esa actitud”, comentó la madre.
Todas las patologías oncológicas infantiles están cubiertas por el AUGE, señaló el médico tratante de la pequeña, José Miguel Díaz, pero el proceso que no está exento de complicaciones. “Las isapres entran en conflicto con los padres, empiezan a cuestionar los tratamientos o quieren hacerlos en lugares que ellos definen, como está estipulado. Los prestadores de este tipo de patologías están definidos por casa isapre”, explica.
A causa de los gastos médicos, la familia inició una campaña para reunir fondos, en una cuenta Chequera Electónica de BancoEstado número 551-7-127363-2 a nombre del papá de la menor, Manuel Muñoz, RUT 11.568.926-6.
Valentina iniciará su tratamiento y su familia se aferra a la esperanza de llevar a la pequeña al exterior, para salvar su vida.
