A Boric le falta odio

Cuando un héroe de nuestro tiempo, el diputado Ignacio Urrutia, se atrevió a rendir homenaje a los cinco escoltas del Presidente Pinochet asesinados por los comunistas hace treinta años, los parlamentarios de izquierda abandonaron la sala para dejarla sin quórum, pero el diputado Gabriel Boric se quedó y dio el quórum.