La Corte de Apelaciones de Santiago declaró inadmisible el recurso de protección que había sido presentado por 37 estudiantes de la Universidad Central (UCEN), que fueron expulsados, acusados de haber ocupado instalaciones del plantel, en julio pasado.

El plantel informó en un comunicado que la acción judicial fue descartado por el tribunal, “dejando en foja cero cualquier intento por coartar un proceso legal de carácter interno”.

Dicho recurso había sido presentado en la Corte por la Federación de Estudiantes de la universidad.

La casa de estudios agregó que el fallo emanado desde el tribunal aclara que los hechos descritos en el recurso de protección dicen relación con un procedimiento sancionatorio que aún está pendiente, teniendo en consideración que el acto impugnado no tiene carácter terminal, ya que en palabras de los propios estudiantes, se ha fijado una audiencia de apelación para el próximo 10 de octubre, condiciones en las que el presente recurso no puede ser admitido a tramitación.

El director de comunicaciones corporativas de la UCEN, Sergio Escobar, afirmó que “a la fecha las acciones que ha llevado adelante la universidad han estado siempre respaldadas y legitimadas en el marco del debido proceso. El tribunal de disciplina (de la universidad) es una instancia de carácter interno, reconocida y validada por toda la comunidad estudiantil. En este marco es que hemos entregado todos los espacios a los estudiantes para que recurran a las instancias pertinentes, siempre bajo el respeto a nuestra orgánica e institucionalidad”.

Escobar agregó que “en los próximos días se realizará la etapa de apelación al proceso, todo de carácter interno. Y si aún la medida de expulsión fuera acogida los jóvenes tienen una tercera instancia que es el recurso de gracia por parte del rector. Aquí todo se ha llevado a cabo bajo la normativa legal vigente por lo que concordamos con el fallo emanado desde la Corte de Apelaciones de Santiago”, manifestó.

La universidad dijo que “de los 37 estudiantes expulsados, 7 corresponden a jóvenes que fueron desafectados de la universidad por razones académicas. Lo anterior implica que sólo 30 alumnos pasarán a la instancia de apelación, que está compuesta por un representante del Consejo Académico Superior, un representante de los estudiantes y un decano de alguna de las facultades que tienen estudiantes sancionados por interrumpir el normal funcionamiento de las actividades en la Ucen, argumento que sentó las bases para la expulsión de los jóvenes en una medida amparada en el reglamento interno de la institución”.