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Un joven inglés llamado Charlie Vincent estuvo clínicamente muerto por 25 minutos durante una operación en Estados Unidos, tras sufrir un desmayo en un campamento de verano en New Hampshire y ser diagnosticado con quemaduras de segundo grado y neumonía grave. A pesar de haber sufrido un paro cardíaco y un mini accidente cerebrovascular, los médicos lograron reanimarlo, determinando que padecía de cardiomegalia. Permaneció en coma inducido una semana, donde se consideró la posibilidad de un trasplante de corazón e hígado, aunque finalmente se descartó. La familia considera este hecho un milagro, y ahora Charlie continuará su recuperación en un hospital en Inglaterra, aunque se estima que en el futuro pueda necesitar un trasplante de corazón.
Medios internacionales dieron cuenta de un milagro médico que se dio en Estados Unidos, donde un joven inglés estuvo muerto por 25 minutos durante una operación. El muchacho fue identificado como Charlie Vincent.
Vincent sufrió un desmayo durante un campamento de verano en New Hampshire. Fue llevado rápidamente hasta un hospital en Concord, donde se le diagnosticó con quemaduras de segundo grado en su cuerpo, producto de la exposición al sol.
Pero eso no fue todo, ya que dos días después los médicos le indicaron que padecía de naumonía grave, por lo que decisiones operarlo para tratar la infección.
De acuerdo a la BBC, en aquel procedimiento se reportó que Charlie sufrió un paro cardíaco, un mini accidente cerebrovascular y su corazón dejó de latir durante 25 minutos.
Lo milagroso del caso es que, pasado ese tiempo, lograron reanimarlo. Días después se determinó que padecía de cardiomegalia (corazón dilatado), por lo que su sistema circulatorio estaba muy debilitado.
Joven estuvo 25 minutos muerto
Lo cierto es que el muchacho permaneció una semana en coma inducido, periodo en el cual se pensó que podía necesitar un trasplante de corazón e hígado. Sin embargo, aquello se descartó.
La situación ha sido catalogada como un milagro. Por lo pronto, la familia de Charlie asegura que él podrá seguir su recuperación en el Hospital General de Northampton (Inglaterra).
“Definitivamente es un milagro que todavía esté aquí. Creo que el hospital en el que estuvo le brindó la atención más increíble y sin eso no creo que lo hubiera logrado”, indicó su madre al citado medio.
No obstante los profesionales estiman que, en un futuro cercano, Charlie Vincent podría necesitar un trasplante de corazón.
