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Resumen generado con una herramienta de Inteligencia Artificial desarrollada por BioBioChile y revisado por el autor de este artículo.

El Juzgado de Garantía de Concepción sobreseyó la causa donde los sindicatos de trabajadores eventuales acusaron de soborno al gerente de Puerto Coronel, Patricio Román. La querella presentada apuntaba a Román de haber ofrecido compensaciones en dinero a portuarios no contratados para formar un nuevo sindicato. La compañía descartó cualquier ofrecimiento económico por parte del ejecutivo, ya que fueron los propios empleados desencantados de los dirigentes gremiales quienes solicitaron reunirse con Román para organizarse en un nuevo sindicato. La fiscal adjunta solicitó el sobreseimiento definitivo del caso, indicando que Román no solicitó ni aceptó recibir un beneficio económico o de otra naturaleza para sí o para un tercero, lo que fue acogido en audiencia en el tribunal de garantía penquista.

El Juzgado de Garantía de Concepción sobreseyó la causa donde los sindicatos de trabajadores eventuales acusaron de soborno, mediante una querella, al gerente de Puerto Coronel, Patricio Román.

La querella presentada por los sindicatos de trabajadores eventuales, y que dio origen a una causa penal en el tribunal penquista en junio pasado, apuntaba a Patricio Román de -presuntamente- haber ofrecido compensaciones en dinero a portuarios no contratados para formar un nuevo sindicato.

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En ese entonces, desde la compañía, si bien reconocieron dicho encuentro -que recordemos se realizó en un hotel de esa ciudad- se descartó cualquier ofrecimiento económico por parte del ejecutivo.

De hecho, fueron los propios empleados desencantados de los dirigentes gremiales, quienes solicitaron reunirse con Román, a fin de organizarse en un nuevo sindicato.

Pese a todo, los líderes sindicales en conflicto con la empresa, presentaron la querella, donde el delito tipificado en la acusación correspondía a la de “soborno a particulares pasivo”.

La fiscal adjunta, Glenda Lagos, solicitó el sobreseimiento definitivo del caso, señalando que el ejecutivo, de acuerdo a los hechos expuestos en la acusación “no solicitó, ni aceptó recibir un beneficio económico o de otra naturaleza para sí o para un tercero”.

Lo anterior fue acogido en audiencia realizada en el tribunal de garantía penquista.