La Dirección General de Aeronáutica Civil (DGAC) confirmó que el avión CC-CMM PA-31-310, perteneciente a Servicios Aéreos Raúl Atala, fue declarado “no aeronavegable” tras una fiscalización realizada el pasado 10 de octubre, luego de denuncias por operar sin cumplir los requisitos técnicos exigidos para una evacuación médica en Chaitén, región de Los Lagos.
Según el organismo, “se le encontraron hallazgos y mientras no los subsane, no puede volar”, según señalaron fuentes de BioBioChile.
La aeronave, explicaron, no cuenta con motor turbohélice, sino con un motor convencional a pistón, y su cabina no es presurizada, características que no cumplen con los estándares establecidos por el Servicio de Salud del Reloncaví para este tipo de operaciones.
El hecho se remonta al pasado jueves, cuando la aeronave fue denunciada por realizar una evacuación aeromédica desde Chaitén en condiciones técnicas que, según se indicó, ponían en riesgo a los pacientes.
Desde el Servicio de Salud del Reloncaví explicaron que el vuelo se concretó porque “el Centro Regulador SAMU decidió optar por la única alternativa de aeroevacuación existente en ese momento”, destacando que la paciente fue trasladada en buenas condiciones hasta el Hospital Puerto Montt.
No obstante, este episodio del avión en Chaitén se suma a otra denuncia registrada el 3 de octubre, en la que otra aeronave —también contratada por el Servicio de Salud— no habría cumplido con los estándares requeridos para una evacuación médica.
El organismo de salud argumentó que la situación se produce tras la suspensión nacional de operaciones de Aerotac, empresa que concentraba cerca del 70% de las licitaciones de evacuaciones médicas en el país. En ese contexto, detallaron que se optó por mantener la continuidad del servicio mediante otras compañías “que cumplen con los requisitos de seguridad sanitaria”.
Sobre el proceso de contratación, el Servicio de Salud indicó que se solicitaron presupuestos a dos oferentes.
“Se privilegió a la empresa más antigua, Transportes Aéreos San Rafael, que ya había sido proveedor. No obstante, luego se escaló al segundo oferente, Servicios Aéreos Raúl Atala, empresa que —según constató la DGAC— presentó un avión declarado no aeronavegable”, indicó.
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