Diferentes factores propiciaron la intensidad con que dos terremotos destruyeron numerosas edificaciones en Turquía y Siria y cobraron la vida de más de 7 mil personas, entre ellos, la norma de edificación y la manera en que se comportaron las placas tectónicas. ¿Podría pasar en Chile? Aunque es poco probable, existen sectores y fallas que sí podrían registrar movimientos similares a los del medio oriente.

Este lunes 6 de febrero, dos terremotos de magnitud 7,7 y 7,6 en la escala de Richter, sacudieron localidades cercanas a la frontera entre Turquía y Siria, al noroeste de Asia, provocando un saldo de más de 7 mil muertos, edificios destruidos y cerca de 30 mil personas heridas.

En Chile, un país acostumbrado a los sismos y con registros recientes de movimientos telúricos sobre los 7 grados, muchos se preguntaron por qué el que tuvo epicentro en Turquía provocó tanto daño. La explicación se basa en diversos factores que conjugaron para tal destrucción y cobro de vidas humanas.

¿Por qué el terremoto de Siria y Turquía causó tanta destrucción?

Las imágenes que dejó el terremoto en Turquía pueden parecer exageradas para una persona acostumbrada a los sismos. ¿Por qué un movimiento telúrico cercano a los 7,7 grados provoca tal destrucción, si en Chile solo genera la caída de algunos adornos?, se preguntarán muchos.

De acuerdo a lo explicado por Cristian Farías, Geofísico, director del departamento de Obras Civiles y Geología de la Universidad de Temuco, los miles de muertos y edificios caídos se deben a una suma de factores.

En primer lugar, el profesional destaca la superficialidad del terremoto, que fue a tan solo 17 km de la superficie, lo que provocó una “intensidad muy fuerte, que recibieron las ciudades cercanas al epicentro”.

Entre Chile y Turquía hay bastante diferencia respecto a las placas tectónicas, puntualizó Farías. “En nuestro sistema tectónico, una placa se mete debajo de la otra, mientras que en Turquía hay varias placas interactuando al mismo tiempo, lo que genera fallas que se mueven de manera distinta”.

De igual manera, aclaró que este movimiento de placas “no fue como los típicos que tenemos en Chile, donde una se mueve una respecto a la otra de manera inversa, sino que fue una strike-slip (horizontal)”.

Lo anterior provocó una ruptura de más de 150 kilómetros de largo, a una velocidad calificada como “enorme” y “alta” por el profesional, que se registró a una medida de IX (9), en una escala del 1 al 10.

Construcciones antiguas a pesar de normas sismoresistentes

“Desafortunadamente, es muy poco común que haya infraestructuras resistentes en el sur de Turquía y especialmente en Siria”, explicó Carmen Solana a BBC, profesora adjunta de vulcanología y comunicación de riesgos en la Universidad de Portsmouth, en Inglaterra.

De acuerdo al medio, las construcciones en la región no estaban preparadas para los terremotos vividos el lunes, una zona que no registraba sismos de tal magnitud desde hace más de 200 años. El movimiento telúrico de mayor valor registrado en Turquía data de 1999, que fue de 7,4° en İzmit, a más de mil kilómetros de los recientes epicentros.

Por otro lado, Cristian Farias aclara que Turquía tiene una norma de construcción sismoresistente, bastante parecida a la de Estados Unidos, pero alejada de la que existe en Chile.

Además, a pesar de la ley mencionada, no todas las edificaciones la cumplían, sobre todo por la antigüedad de ellas. Esto fue otro factor que jugó a favor de la destrucción que quedo evidenciada en numerosos videos en Internet respecto al terremoto en Turquía.

¿Podría pasar en Chile algo similar al terremoto de Turquía y Siria?

Ya entendiendo ciertas diferencias que provocaron mayor daño de vidas humanas y de infraestructura en Siria y Turquía por los terremotos, cabe preguntarse si puede pasar algo similar en Chile, donde los movimientos de la tierra, parecen ser algo común.

Al respecto, el Geofísico esclareció que es difícil, pero no imposible. ¿Por qué? Resulta que en nuestro país existen fallas en el sur que han provocado grandes terremotos. Una de ellas es la de Magallanes, la que tiene un movimiento parecido a las del epicentro reciente y que anteriormente ha producido sismos de 7,5°.

Por otro lado, nombró la falla Liquiñe-Ofqui, que recorre 1.200 kilómetros desde el volcán Copahue en el Bío Bío, hasta Istmo de Ofquiy, en Aysén. “Aunque podría albergar un terremoto mayor a 7, no hemos visto algo así tan grande, sino 6,2 por ejemplo”, aclaró.