“Se recomienda la reposicion de la escuela de la localidad de Tumbes, la que actualmente funciona en una estructura de modulos provisorios, construidos post sismo de 2010, y sin contar con los recintos normativos requeridos para el correcto desarrollo de su proyecto educativo institucional.

Se analizaron las alternativas de traslado de los alumnos a un establecimiento en el centro de Talcahuano y la reposición en un terreno en la zona alta de la localidad. Se selecciona la alternativa de reposicion en el mismo terreno, ya que es la que presenta menor costo anual equivalente cae y mayores ventajas de localizacion y accesibilidad para los alumnos.

Se aplicó la metodologia complementaria de evaluacion de riesgo de tsunami y se determina que para que el riesgo sea clasificado dentro del rango tolerable, es necesario el emplazamiento del establecimiento en la zona de menor altura de inundacion y que en esta ubicación no es posible considerar el establecimiento como albergue de ningun tipo”.

Texto extraído del Banco Integrado de Proyectos, Ministerio de Desarrollo Social y Familia, por la Reposición Escuela Modular F-495 Tumbes, Talcahuano, código BIP 40009887-0″.

Por Camila Wirsching
Directora Fundación Proyecta Memoria

Un Alcalde, un Diputado, un Senador o un Ministro de Desarrollo Social ¿permitiría usted que su hijo o hija estudie en un establecimiento educacional construido el 2022 que se ubica en una zona de riesgo de tsunami “tolerable”?

En octubre del año 2020 se conoció la decisión tomada por la Municipalidad de Talcahuano de reconstruir la Escuela Básica F95 de Tumbes en el mismo sector que poco más de 10 años un tsunami provocado por un terremoto 8.8, que destruyó el único establecimiento educacional de esta localidad pesquera.

En esa ocasión los estudiantes de la escuela básica, que reciben a niñas y niños de entre 4 y 11 años, no fueron alcanzados por las embarcaciones que fueron arrastradas por el mar y destruyeron su escuela. Ese 27 de febrero de 2010 a las 03:14 hrs. de la madrugada la gran mayoría de los estudiantes de encontraban en sus casas, muchas de ellas ubicadas en las zonas altas y seguras ante tsunamis. Este fin de semana se conmemoran 11 años de esa tragedia, la cual ninguno de los actuales estudiantes de esta escuela tuvo la oportunidad de vivir. Muchos de ellos ni siquiera habían nacido.

La decisión de mantener la nueva escuela de Tumbes en una zona con riesgo de tsunami es algo que la Municipalidad reconoce y avala en la carta de respuesta al requerimiento que la Fundación Proyecta Memoria realizó en noviembre de 2020 para reconsiderar esa decisión y analizar una nueva localización, segura y sin exposición al riesgo de tsunami.

La carta de respuesta señala que la evaluación realizada por el Ministerio de Desarrollo Social y Familia para aprobar la inversión de fondos público en este proyecto, asume que la ubicación de la futura escuela se encuentra en un área definida por el SHOA como un área inundable ante tsunami, con una cota de altura de entre 0 y 1 metro de altura. Si bien esta altura parece ser baja (es la altura de un niño de 5 años), durante el 27F fue capaz de arrastrar embarcaciones de gran tamaño que terminaron por destruir la antigua escuela. Para el Ministerio de Desarrollo Social y Familia este riesgo se encuentra dentro de un “rango tolerable”.

En países como México o Japón está prohibido instalar escuelas en zonas de riesgo de tsunami.
Parte de la propuesta que Proyecta Memoria ha hecho a la Municipalidad de Talcahuano fue considerar la ubicación de la nueva escuela en un lugar seguro ante tsunamis. Un lugar hacia donde dirigirse en caso de una evacuación – como un albergue comunitario- y no un lugar del cual huir ante una alarma de tsunami. La nueva escuela de Tumbes se está ubicando en un lugar del cual 200 niños y niñas de entre 4 y 11 años deberán salir corriendo para llegar en menos de 10 minutos a una zona segura ubicada, al menos a 800 metros de distancia- lo que equivale a 7 cuadras- y en una pendiente ascendente. En ese sector existe solamente una única vía de evacuación, la cual podría ser rápidamente saturada por apoderados corriendo en sentido contrario a la evacuación para ir en busca de sus hijos. El escenario podría ser caótico y dificultar la evacuación de todos.

Niveles de amenaza en Tumbes

Mapa Tumbes | Cedida
Mapa Tumbes | Cedida

La propuesta de la fundación de ubicar la nueva escuela en la zona alta de Tumbes, no es nueva: el plan de reconstrucción post 27F para la caleta de Tumbes, reconoció claramente el efecto que el tsunami tuvo en la zona de equipamiento público de la Caleta de Tumbes y por esa razón propuso su relocalización en la zona alta donde en conjunto se planeó construir una nueva zona residencial (actual Población Las Caletas). En la zona donde se ubicaba la escuela y otros equipamientos expuestos al riesgo de tsunami se propuso una zona de espacio público deportivo, como una manera de asegurar reducir la posibilidad de que un nuevo tsunami pusiera en riesgo a la población. De acuerdo con el análisis del Ministerio de Desarrollo Social y Familia, el costo de ubicar la escuela en la zona alta es muy alto como para ser asumido por el Estado.

Esto se suma que las escuelas son una infraestructura clave para los procesos post desastre, puesto que se convierten en alberges, centro de acopio y organización de la población.

La vigente Constitución Política de Chile asegura en su primer artículo el resguardo de la seguridad nacional y la protección de la población y la familia. Las políticas públicas que el Estado diseña para este fin no deben dejar espacios para que la evaluación económica se imponga ante la mínima posibilidad de que lo más preciados de un país, sus niñas y niños, desarrollen su vida en un lugar expuesto a un riesgo evidente. Cuando se trata de exponer al riesgo, no hay espacio para establecer un riesgo tolerable. Después de solamente 11 años de lo ocurrido el 27F, no hay espacio para olvidar, sino para actuar. La memoria salva vidas.