El escándalo financiero denominado “Los Papeles de Panamá” (The Panama Papers), salpicó al ex presidente de la UDI e imputado por el caso Penta, Jovino Novoa.

Y es que el estudio Guerrero, Olivos, Novoa, y Errázuriz -actualmente sólo Guerrero Olivos-, forma parte de la lista de los abogados o estudios jurídicos que actuaron como intermediarios entre la empresa y el bufete Mossack Fonseca, firma que se especializaba en servicios fiduciarios, es decir, administraban fondos a nombre de otras personas- aprovechando los beneficios fiscales del país centroamericano.

De esta manera presidentes, reyes, aristócratas, empresarios, artistas e incluso deportistas y sus familiares, podían montar lo que se denomina una empresa offshore. Esto es, un negocio que puede funcionar en cualquier lugar del mundo, pero bajo las relajadas normativas panameñas.

Jovino Novoa dejó el estudio de abogados el año pasado, luego que éste fuera involucrado en el caso Penta, y las sociedades offshore habrían comenzado a formarse en 2012, según la indagatoria.

De acuerdo a Ciper Chile, en los registros secretos filtrados de Mossack Fonseca, figuran cerca de 200 sociedades offshore ligadas a Chile. De ahí es posible destacar nombres como Gonzalo Delaveau, presidente de Chile Transparente; los controladores de Ripley y BCI; el ex presidente de la CPC, Alfredo Ovalle; el dueño de El Mercurio Agustín Edwards, el ex ministro de Hacienda, candidato presidencial y hasta hace poco director de Soquimich, Hernán Büchi.

Estas sociedades offshore se crean en un paraíso fiscal, y en al menos seis días hábiles quedan inscritas en la jurisdicción que eligen las empresas. Mossack además propone una vía exprés a través de una “sociedad de reserva”, la cual se inscribía antes en un paraíso fiscal.

Ahí es donde llega la intervención de los abogados o estudios jurídicos, que actúan de intermediarios entre la empresa y Mossack Fonseca, según consigna el diario electrónico El Mostrador.

En Chile aparecen estudios jurídicos como Cariola, Díez, Pérez-Cotapos & Cía.; Guerrero, Olivos, Novoa y Errázuriz ; Vial y Cía.; Cuevas Abogados; Ovalle y Cía.; y Mena y Guijón abogados, entre otros, indica Ciper Chile.

El objetivo de estos es la cancelación de anualidades, legalizaciones, entrega de poderes, obtención de certificados, inclusive aportar sus nombres para formar parte de directorios.