El 70% de los argentinos rechaza el uso de la energía nuclear por considerarla peligrosa, contaminante y costosa, según una encuesta realizada por la organización ambiental Greenpeace y divulgada este lunes, al cumplirse el 25º aniversario de la catástrofe de Chernobyl.

“Los resultados son contundentes: siete de cada diez argentinos considera que la energía nuclear es muy peligrosa o peligrosa, proporción que aumentó con respecto a una medición similar realizada en 2006″, aseguró la entidad en un comunicado.

El sondeo reveló asimismo que el 64% de los entrevistados considera que la central nuclear de Atucha II no debería terminar de construirse y que el financiamiento previsto para este proyecto debería ser destinado a programas de energía eólica.

“A 25 años del desastre de Chernobyl y a pocos meses de la tragedia de Japón, queda demostrado el contundente rechazo de los argentinos a la energía nuclear y la existencia de una posición sostenida de la población con respecto al desarrollo de este tipo de energía”, afirmó Ernesto Boerio, coordinador de la campaña de Clima.

Según el sondeo, un 74% de los entrevistados opina que se debería eliminar la opción nuclear en la generación de energía y un contundente 78% apoya la realización de inversiones en proyectos de energías alternativas.

La encuesta se realizó en las principales ciudades de Argentina con más de medio millón de habitantes entre el 11 y el 20 de abril e involucró a 600 personas (54% mujeres y 36% varones), precisó la organización.

El desastre de la central ucraniana de Chernobyl tuvo lugar el 26 de abril de 1986 y provocó emisiones radiactivas equivalentes a al menos 200 bombas de Hiroshima.

Hace seis semanas en Japón, un devastador sismo y tsunami afectó la central atómica de Fukushima, que aún continúa sin control y obligó a la evacuación de 80.000 personas.

Argentina tiene desde 1974 en funcionamiento la central de Atucha I, la primera de América Latina, y la central de Embalse, mientras que desde 1981 está construyendo Atucha II.