Inversores y analistas esperan que la caída de Laurent Gbagbo en Costa de Marfil permita una reactivación de las exportaciones de cacao y calme el alza de los precios, aunque la vuelta a la normalidad podría llevar tiempo.

“El cacao marfileño no debería tardar en volver al camino de los mercados. Reservas muy importantes se acumularon en el país y esperan ser comercializadas”, indicó a la AFP la experta Sudakshina Unnikrishnan, de Barclays Capital.

Durante los cuatro meses de conflicto, la cosecha de cacao continuó y unas 400.000 toneladas de habas marrones se acumulan en los puertos marfileños de Abiyán y San Pedro.

Reconocido presidente por la comunidad internacional, Alassane Ouattara había pedido en enero un embargo de las exportaciones de cacao para privar a su rival Gbagbo, aferrado al poder, de recursos financieros.

Esta demanda, apoyada por sanciones europeas y muy seguida por los comerciantes, había privado al mercado del cacao de Costa de Marfil, primer productor del planeta y que representan el 35% de la oferta mundial.

Los precios se habían disparado de inmediato, subiendo a principios de marzo hasta 3.775 dólares la tonelada, su nivel más alto desde 1979 en Nueva York.

Sin embargo, bajaron más de 10% desde inicios de abril, ya que los operadores anticipaban la victoria del campo de Ouattara y el flujo en el mercado de inmensas cantidades de reservas marfileñas.

El viernes pasado, la Unión Europea (UE) levantó sus sanciones contra los puertos de Costa de Marfil, una decisión celebrada por los principales comerciantes del sector.

“Aplaudimos las señales que indican que muy pronto podríamos reanudar las exportaciones. Por el momento, observamos la evolución de la situación y organizamos nuestra logística en función de ella”, señaló a la AFP un portavoz de Barry Callebaut, número uno mundial del chocolate industrial.

La misma expectativa tiene el gigante agroalimentario norteamericano Cargill, que proyecta recomenzar sus exportaciones “apenas lo permitan las condiciones en el país”.

Los profesionales del sector temen de todos modos que los ajustes necesarios para una vuelta a la normalidad lleven tiempo, especialmente si continúa la violencia en el país a pesar de la caída de Gbagbo.

“El problema del financiamiento del sector del cacao, y de los bancos, debe ser resuelto para que las ventas mejoren”, confirmó Unnikrishnan.

La Organización Internacional de Cacao (ICCO) prevé para la temporada 2010-2011 una cosecha en alza de cerca de 7% en Costa de Marfil, en más de 1.320 millones de tonelada, a raíz de condiciones meteorológicas excepcionalmente favorables.

El ICCO continúa apostando un producción adicional a nivel mundial este año, a pesar de un consumo robusto en alza de 2,8%.