El presidente de Estados Unidos, Barack Obama, cumple una gira relámpago por 4 estados del país, en busca de reanimar el voto demócrata, a falta de 5 meses para unas elecciones legislativas donde su partido podría perder la mayoría en el Congreso.

Obama inció en Nuevo México la gira, que también lo llevará a Wisconsin, Iowa y Virginia.

El viaje de dos días fue diseñado para obstruir los esfuerzos del Partido Republicano de controlar su agenda y conectarse con los estadounidenses del interior del país, ansiosos ante la vacilante recuperación económica, en esos estados clave del oeste del país.

Asimismo, busca reanimar las legiones de jóvenes electores que con su voto lo ayudaron a llegar a la Casa Blanca en 2008 y que podrían ser claves si se presenta a la reelección de 2012.

En una entrevista divulgada el martes por la revista Rolling Stone, el presidente llamó a sus más firmes seguidores a “esforzarse” y “sacudir su letargo” para evitar un fracaso del Partido Demócrata en las legislativas del 2 de noviembre.

El gobernante también pidió a los más progresistas, que le reclaman por su gestión, aceptar la realidad. “Es inexcusable que un demócrata o un progresista se quede ahora al margen de estas elecciones”, dijo Obama a la revista.

De su lado, el líder de la mayoría demócrata en la Cámara de Representantes, Steny Hoyer, intentó disipar dudas en declaraciones a la prensa en Washington: “Conservaremos (la mayoría) en la Cámara”, aseguró.

“Creemos que estamos fuertemente posicionados como para conservar la Cámara y lo haremos. Tenemos buenos resultados en los sondeos”, añadió Hoyer.

Los estadounidenses irán a las urnas el 2 de noviembre para renovar las 435 bancas de la Cámara de Representantes y 37 de las 100 del Senado.

Con una presidencia marcada por la guerra, una lenta recuperación económica, un alto desempleo, el entusiasmo que despertó Obama en la campaña de 2008 parece ser cosa del pasado.

Asimismo, Obama aclaró en una conversación con votantes en Albuquerque que era cristiano “por elección”, cuando recientes sondeos que indican que muchos estadounidenses consideran equivocadamente que profesa la religión musulmana.

“Soy cristiano por elección”, dijo a una mujer que le preguntó sobre el asunto al ser consultada por una votante.