Marco Enríquez-Ominami se reunió con el presidente de la Conferencia Episcopal y Obispo de Rancagua, Monseñor Alejandro Goic.

En la ocasión, el tema a tratar era acerca de la línea corta de la pobreza, donde Enríquez-Ominami indicó que debe recalcularse, ya que los hábitos de los chilenos han cambiado y, por lo tanto, debe pasar de los 64 mil pesos a los 102 mil pesos.

En tanto, agregó que el sueldo mínimo debería quedar en 240 mil pesos. “En Chile hay muchos más pobres de lo que dice el Gobierno”, finalizó.