El ex candidato presidencial guatemalteco Alejandro Giammattei se declaró este viernes “preso político” y anunció el inicio de una huelga de hambre, tras entregarse a la justicia que lo reclamaba por la ejecución extrajudicial de siete reos.

El político opositor aseguró en breves declaraciones que los cargos en su contra son falsos y que se le involucró en tales delitos para desgastar su imagen y que no pueda postularse a la presidencia en las elecciones generales de 2011.

De acuerdo con Giammattei, “su cabeza tiene un precio” y se siente “un preso político”, por lo que anunció que iniciaba desde este viernes una huelga de hambre indefinida.

El dirigente político abandonó la embajada de Honduras, en la que se había refugiado hace nueve días, aduciendo amenazas y persecución política en su contra.

Giammattei, que en 2007 participó como candidato a la presidencia por la entonces gobernante Gran Alianza Nacional (GANA) también responsabilizó al gobierno de su país y a Honduras de lo que pueda sucederles a él y a su familia.

El ex candidato fue llevado al Juzgado Primero de Alto Riesgo, pero debido a la falta de un abogado defensor, la audiencia para su primera declaración fue suspendida y trasladada para la próxima semana.

Posteriormente fue trasladado a una base militar convertida en prisión.

Giammattei, quien dirigió el Sistema Penitenciario durante el gobierno de Oscar Berger (2004-2008), es acusado por la Comisión Internacional contra la Impunidad en Guatemala (Cicig) de formar parte de una estructura criminal que funcionaba dentro del ministerio del Interior de Guatemala entre 2004 y 2007.

Según la Cicig, ese grupo habría ejecutado de forma extrajudicial a siete reos, el 25 de septiembre de 2006, en la Granja Penal de Pavón, durante una operación denominada “Pavo Real”, por medio de la cual pretendía recuperar esa prisión que estaba bajo el control de los internos.

Por este caso han sido capturadas ocho personas, y se han emitido órdenes de detención en contra de otras diez, entre ellas el ex ministro del Interior Carlos Vielman, el ex director de la Policía, Erwin Sperisen y el ex subdirector de Investigación Criminal, Javier Figueroa.

Vielman, Sperisen y Figueroa, según la Fiscalía, se encuentran en España, Suiza y Austria, respectivamente, por lo que se ha solicitado el apoyo de la Interpol para capturarlos.