El Banco de España intervino este sábado una segunda caja de ahorros regional, la segunda desde el inicio de la crisis en 2008, al salir al rescate del banco Cajasur, en un momento delicado en el que los mercados dudan de la capacidad de recuperación económica del país.

En grandes dificultades financieras, Cajasur, una caja de ahorros del sur de España controlada hasta el presente por la Iglesia católica, fue puesta bajo tutela pública, tras el fracaso de un proyecto de fusión con otro establecimiento, Unicaja.

El Banco de España explicó que había decidido “sustituir los administradores de Cajasur” y designar como administrador provisional al “Fondo de Reestructuración Ordenada Bancaria” (FROB), que depende de sus servicios.

Dicha medida fue adoptada “como consecuencia de los problemas de viabilidad que presenta la entidad y ante la imposibilidad de culminar el acuerdo de integración con Unicaja”, explicó el Banco de España.

Según el diario El País, Cajasur, que registró una pérdida de 596 millones de euros en 2009 “se encuentra al borde de la bancarrota”.

Exasperada por la lentitud de las negociaciones para la fusión con Unicaja, el Banco de España le había dado a Cajasur un plazo hasta el viernes a medianoche para concluir la unión.

Ahora podría verse obligada a inyectar 550 millones de euros para volver a poner a flote este establecimiento esencialmente implantado en Andalucía (sur), y que representa el 0,6% de los activos bancarios españoles.

El monto del apoyo financiero, anunciado por diferentes medios españoles, entre ellos Radio Nacional de España (RNE), no ha sido confirmado oficialmente, aun cuando el Banco de España confirmó que Cajasur iba a recibir “los recursos en capital necesarios”.

Esta medida, adoptada como consecuencia de los problemas de viabilidad que presenta la entidad y ante la imposibilidad de culminar el acuerdo de integración con Unicaja, “garantiza que CajaSur pueda seguir operando con normalidad y cumpla con todas sus obligaciones frente a terceros. Por tanto, los depositantes y acreedores pueden estar totalmente tranquilos”.

“Se ha acordado suscribir los recursos de capital necesarios para que la caja alcance un coeficiente de solvencia superior al mínimo legal y facilitar una línea de liquidez que le permita cubrir todas sus necesidades. El FROB dispone para ello de la amplia capacidad financiera que le otorgó el Real Decreto-ley 9/2009, que estableció una dotación inicial de 9.000 millones de euros, ampliable hasta diez veces más con financiación externa.

Este rescate es el segundo de este tipo realizado por el Banco de España desde el comienzo de la crisis económica y financiera a fines de 2008, tras un plan de rescate para la Caja de Ahorros de Castilla-La Mancha (CCM), en marzo de 2008.

Este nuevo plan de rescate representa “un mala noticia en el peor momento”, estimó el sábado el líder de la oposición de derecha, Mariano Rajoy, en referencia a la actual desconfianza de los mercados con respecto a la capacidad de saneamiento y de recuperación económica de España.