El presidente Fernando Lugo ordenó reducir el consumo de luz en todas las instituciones públicas y apagar las luces ornamentales del palacio de gobierno, para enfrentar la crisis de energía que afecta a Paraguay, informaron este miércoles portavoces oficiales.

A través de una disposición que fue distribuida a todas las instituciones públicas, el jefe de estado ordenó que se use el mínimo de electricidad para enfrentar una saturación del sistema.

Una de las decisiones fue la de apagar las luces ornamentales del palacio de gobierno entre las 19H00 y las 22H00, señaló el mensaje.

Paralelamente, el gobierno inició una campaña mediática para exhortar a la población a reducir el consumo en esas tres horas de máximo consumo.

El presidente de la Administración Nacional de Electricidad, Germán Fatecha, anunció la compra de generadores de diesel para hacer enfrentar el desabastecimiento en algunas ciudades del interior del país.

Fatecha dijo que si bien Paraguay cuenta con suficiente energía eléctrica, el sistema de transportación desde las hidroeléctricas “se encuentran colapsados”.

El funcionario sostuvo que Paraguay necesita de 1.000 millones de dólares para solucionar el caos eléctrico y reconoció que todavía esperan tres meses críticos.

La Unión Industrial Paraguaya (UIP) urgió hoy al gobierno “soluciones inmediatas para evitar consecuencias impredecibles”.

Advirtió que varia plantas interrumpieron sus labores con el consecuente aumento de la desocupación.

Los funcionarios gubernamentales atribuyen la culpa a los gobiernos anteriores.

Sin embargo, el vicepresidente de Paraguay, Federico Franco, dijo que la actual administración debe asumir su cuota de responsabilidad.

“Tenemos que dejar de culpar a los gobiernos anteriores. Es nuestra responsabilidad y debemos asumir”, remarcó.

Paraguay explota dos hidroeléctricas internas y otras dos con Brasil y Argentina, que sumadas producen 20.000 megavatios de potencia, de los cuales requiere el 10% para abastecerse.