Desde la llegada de la reina Isabel II al trono de Inglaterra, la vida privada de la realeza británica comenzó a despertar el interés en el mundo entero… y lo sigue haciendo hasta hoy.
Durante décadas los tabloides han conseguido ganar millones gracias a las diferentes historias nacidas a partir de los miembros de la familia real. Y a pesar que no todas sus informaciones son basadas en hechos reales, la curiosidad de la gente es más grande.
La aparición de la princesa Diana, el affaire del príncipe Carlos con Camilla Parker Bowles y el divorcio de los príncipes de Gales, alimentaron a la prensa en los años 80 y 90. Con la llegada del nuevo milenio, el interés se centró en los príncipes William y Harry, cuyo comportamiento juvenil, fiestas nocturnas y romances llenaron muchas más portadas.
En el último tiempo son sus esposas quienes acaparan el interés, y es que los rumores de peleas entre Kate Middleton y Meghan Markle se han vuelto más sabrosos que cualquier teleserie.
Pero, como dijimos, no todos los rumores son ciertos y a continuación te contamos algunos de los más locos.
El príncipe Harry no es hijo del príncipe Carlos
Durante muchos años se dijo que la princesa Diana había tenido diferentes amantes mientras estaba casada con el príncipe Carlos, quien a su vez estaba enamorado de Camilla. Esto alimentó el rumor de que el príncipe Harry no era en realidad hijo de Carlos.
Hasta hace pocos meses algunos medios ingleses planteaban la pregunta respecto a si el duque de Sussex era en realidad hijo de James Hewitt, un exmiembro de la caballería británica que habría enamorado a Lady Di en los años 80, mientras le daba clases de equitación.
Para sustentar dicha idea, la prensa y las redes sociales hablaban del parecido físico entre Harry y James, partiendo por el hecho que ambos son colorines. A esto se sumó que el mismo Hewitt escribió dos libros de su supuesto romance con Diana y además vendió a los medios cartas privadas que le habría dedicado la princesa e incluso una del príncipe William, de cuando tenía sólo cinco años.
La verdad es que Hewitt conoció y comenzó a trabajar con la princesa en 1986, cuando Harry ya tenía dos años. Incluso él ha salido a desmentir este rumor.
“Puedo entender el interés, pero Harry ya caminaba cuando yo empecé mi relación con Diana. Su pelo rojo es similar al mío y la gente dice que nos parecemos. Pero nunca he fomentado esa opinión y aunque estuve largo tiempo con Diana debo dejar claro de una vez por todas que no soy su padre”, aseguró a la revista People en 2002.
El príncipe Carlos siempre lleva su asiento de baño con él
Uno de los rumores más antiguos que circula en torno al príncipe Carlos, es la excesiva atención que presta a temas de higiene. Incluso durante muchos años se dijo que el hijo de la reina Isabel, llevaba consigo su propio asiento de baño cada vez que viajaba.
Durante una visita a Australia en 2018, el príncipe concedió una entrevista a la radio Hit105 donde fue consultado sobre este antiguo rumor.
Según el diario inglés Daily Mail, los locutores le preguntaron si era cierto que viajaba llevando su propio asiento para inodoro, lo que sorprendió al futuro rey de Inglaterra. “¿Mi propio qué?”, dijo. “No creas toda la mierda que dicen”, agregó saliéndose de protocolo.
El rumor revivió tras la publicación de la biografía del príncipe escrita por Tom Bower, donde también aseguran que Carlos se cambia de ropa cinco veces al día y que viaja con su propio colchón.
Lady Di tuvo una hija secreta
Uno de los rumores conspirativos más locos, vino de la revista norteamericana Globe, donde se aseguró que la princesa Diana tuvo una hija llamada Sarah, quien era sólo ocho meses mayor que el príncipe William.
En abril de 2015 la publicación aseguró que antes de su matrimonio con el príncipe Carlos, la reina exigió que Diana se sometiera a una examen para confirmar la fertilidad de la entonces joven virgen de 19 años.
El médico que realizó aquel examen se habría apropiado de uno de los óvulos de la princesa, lo habría fecundado e implantado en su esposa, dando como resultado una niña que hoy tendría 37 años.
La revista aseguró que habló con la supuesta mujer, quien habría revelado que sus padres murieron en un accidente de tránsito y que se enteró de la verdad tras encontrar un diario con la información.
Luego de conocer la historia, habría comenzado a buscar a su madre, pero habría sido amenazada para que se detuviese.
La publicación también aseguró que Kate Middleton, Meghan Markle y el príncipe Harry habrían conocido a la mujer.
La reina planeó la muerte de la princesa Diana
El 31 de agosto de 1997, la princesa Diana de Gales murió en un trágico accidente en París, mientras era perseguida por un grupo de paparazzi.
Su muerte ha estado rodeada de un sin fin de teorías conspirativas, y una de las más populares es que ésta fue planeada por su exsuegra, la reina Isabel.
Al momento de fallecer, la princesa Diana llevaba cinco años separada del príncipe Carlos, sin embargo, su popularidad era mayor que la de él, pese a la publicidad negativa que la rodeaba.
A esto se sumó que la princesa había comenzado un romance con el empresario musulmán Dodi Al Fayet. En ese tiempo se decía que ella estaba embarazada y que contraerían matrimonio, lo cual convertiría al hombre en el padrastro del futuro rey de Inglaterra.
Esta idea era impensada para la Reina y el príncipe Felipe de Edimburgo, por lo que con la ayuda del servicio de inteligencia británico, habrían provocado el fatal accidente.
Kate Middleton nunca ha estado embarazada
Luego que Kate Middleton apareciera luciendo perfecta sólo siete horas después de haber dado a luz al príncipe Louis, varios comenzaron a preguntarse si la duquesa de Cambridge estuvo realmente embarazada.
En 2017, antes que se diera a conocer el tercer embarazo de Kate, el portal RadarOnline sorprendió al mundo al asegurar que la princesa tenía problemas para volver a concebir, por lo que habría recurrido a un vientre de alquiler para tener un tercer hijo.
Según el portal, el matrimonio de los duques se ha desgastado y Middleton presentaba distintos problemas de salud, como bulimia y anorexia, por lo que no habría estado en condiciones de llevar a término un embarazo.
Cuando se anunció el nacimiento del príncipe Louis, un portal ruso retomó el tema y afirmó que Middleton utilizó un abdomen falso todo el tiempo para hacer creer al mundo que estaba embarazada, y que obviamente no fue ella quien dio a luz. Incluso fueron más allá y también cuestionaron el nacimiento de los príncipes George y Charlotte.
Meghan Markle es un robot
Tras su matrimonio con el príncipe Harry, Meghan Markle ha inspirado una serie de teorías bastante alocadas. Una de ellas surgió el año pasado y aseguraba que la exactriz era nada menos que un robot.
El origen de esta teoría nació tras la viralización de un video de la final del programa Britain’s Got Talent, donde entre el público se puede ver a los duques de Sussex.
Cuando las cámaras enfocan a Meghan se le ve con movimientos mecánicos y sin pestañar, lo que despertó rumores que se trataba de un robot, sin embargo, la verdad es que eran dos actores con máscaras que quisieron engañar a todos.
La Reina Isabel es una caníbal satánica
Es probablemente uno de los derechos más antiguos y extraños de los monarcas, pero si así lo quisiera, Isabel II podría arrebatar un niño de los brazos de su madre sin que nadie pudiese objetar su decisión.
Antiguas leyes consideraban al monarca como el guardián y protector de todos los niños e infantes, por lo cual si lo estimaba conveniente, podía llevarse a un menor de edad y educarlo o hacer cualquier cosa que quisiera con él.
Esto desató los rumores de que la Reina y su esposo, el príncipe Felipe, secuestraban niños.
De hecho, un hombre identificado como William Combes aseguró que vio cómo la monarca secuestraba a 10 niños de una escuela católica, en 1964.
Pero el rumor no quedó ahí, ya que seis años después, un soldado anónimo en servicio en el hogar de Isabel II, afirmó que encontró en el castillo Windsor un gran congelador donde supuestamente habían partes humanas de niños, como brazos y piernas, etc.
A partir de ese momento, algunos admiradores de las conspiraciones empezaron a asegurar que Isabel II había hecho un pacto con el Diablo y que en su honor comía carne humana para mantenerse con vida.
La familia real es reptiliana
Es quizás uno de los rumores más absurdos, pero también uno de los favoritos de las redes sociales. Aunque nadie sabe bien cómo surgió, existe un grupo importante de personas que creen que los miembros de la familia real provienen de lagartos alienígenas que cambian de forma.
El excomentarista deportivo de BBC, David Icke, es uno de los famosos que cree en esta teoría y de hecho ha escrito más de un libro donde asegura que la “humanidad está bajo el control de aliens con figuras parecidas a las de los dinosaurios, que deben consumir sangre humana para mantener su apariencia”.
Icke ha afirmado que tiene una entrevista con Christine Fitzgerald, confidente de la princesa Diana, quien habría confirmado su teoría. Según ella, la familia real no muere, sino que sufre una metamorfosis, regenerando su piel de la misma manera que un lagarto puede hacer crecer su cola.
Wallis Simpson era un hombre
Meghan Markle no fue la primera norteamericana divorciada en conquistar a un príncipe inglés, 90 años antes Wallis Simpson provocó que un rey abdicara a su trono para poder estar con ella.
El rey Eduardo VIII decidió dejar su poder pues no podía casarse con la mujer que amaba y juntos enfrentaron el exilio. Sin embargo, debido a las facciones de su rostro y su cuerpo atlético, durante muchos años algunas personas creyeron que Wallis en realidad era un hombre.
Con el tiempo comenzó a teorizarse que Simpson pudo haber sufrido una forma de trastorno del desarrollo sexual conocida como intersexualidad, que básicamente es la existencia de un estado intermedio entre hombre y mujer.
Después de su muerte, los rumores sobre su identidad sexual continuaron, incluso un supuesto amigo aseguró que ella se negaba a permitir que alguien la tocara.
La verdad, sin embargo, es que Wallis tenía un carácter fuerte y decidido, que no agradaba a todo el mundo.
