Mayoría chilenos y aproximadamente 30 años: el perfil de explotadores sexuales infantiles en Los Lagos

Un reciente informe entregó un perfilamiento de los explotadores sexuales infantiles presentes en la región de Los Lagos, revelándose detalles sobre que la mayoría corresponden a chilenos cuya edad es cercana o menor a 30 años.

114 hombres han sido perfilados en el marco de denuncias e investigaciones relacionadas a este tipo de vulneraciones, las cuales se generan sobre víctimas bajo el resguardo del Estado por haber sufrido graves vejámenes en su desarrollo.

Un estudio realizado por el Servicio de Protección Especializada a la Niñez y la Adolescencia reveló que quienes cometen estos delitos, tienen medios vinculados a redes conectadas con el crimen organizado.

De ese grupo se desprenden aquellos que se acercan a residencias de menores, que son particularmente sujetos con un poder adquisitivo regular, aunque con capacidades de movimiento, vinculadas al transporte. Esto ha provocado que cuando se genera una noticia relacionada a la persecución de delitos migren a otros territorios en la región.

Perfil de explotadores sexuales infantiles en Los Lagos: cerca de 30 años y rasgos psicopáticos

Otros datos dan cuenta que se trata de personas con edades cercanas o menores a los 30 años con la necesidad de reafirmar masculinidad, con características psicopáticas y que buscan la ganancia monetaria con base en la explotación.

Sobre sus nacionalidades, del 100% se ha podido caracterizar a la mitad, siendo 27% chilenos, siguiéndoles venezolanos, colombianos y peruanos.

El defensor de la Niñez, Anuar Quesille, advierte que el gran desafío está en la prevención, puesto que hay brechas en la aceptación de conductas que son violentas contra los menores de 18 años, resaltando que la explotación sexual es eliminable.

El director regional del Servicio de Protección Especializada a la Niñez y la Adolescencia, Pedro Adrians, asume que en la sociedad el castigo para los explotadores sexuales está calificado como débil o insuficiente.

La abogada asesora de la Fiscalía regional, Claudia Pino, abordó los castigos a los que pueden ser sometidos en tribunales los hombres que caen tras investigaciones desarrolladas por el Ministerio Público.

“En el caso de quien es imputado o receptor de la conducta, tiene una pena que va de 3 años y un día a 5 años de privación de libertad. En el caso de quien promueva o facilite la explotación sexual, la penalidad va de 5 años y un día a 10 años de privación de libertad“, detalló.

“Si la conducta se comete de manera habitual, o hay un aprovechamiento de la relación de dependencia del victimario hacia la víctima, la pena aumenta de todas maneras“, agregó.

La jurista advierte que, en caso de configurarse delitos de abusos sexuales o violación, se persigue esa forma penal ya que se castiga con más años tras las rejas.

Cabe recalcar que también que, tras publicarse ampliamente casos, por ejemplo, ocurridos en Puerto Varas, se alerta que los explotadores sexuales se movieron a Chiloé, temiéndose ahora que operen en Osorno.