Profesor de Historia, militante comunista y fanático de Santiago Morning. Estas son algunas características del ministro que cobrará protagonismo durante el último año de Gabriel Boric en La Moneda. Se trata de Nicolás Cataldo, titular de Educación, quien liderará dos proyectos emblemáticos del Gobierno. Si bien vio frustrado su salto a Interior en 2022 tras reflotarse viejos tuit en contra de Carabineros, hoy se perfila como una de las autoridades que más pruebas deberá rendir.

Poner la lápida al Crédito con Garantía Estatal (CAE) y reparar la deuda histórica con el profesorado de Chile. Estas son las dos promesas inscritas en el programa presidencial de Boric que hoy hereda Nicolás Cataldo.

Si bien la actual administración postergó su tramitación, privilegiando otras materias como la reforma previsional y el pacto fiscal, llegó el momento de concretar. Septiembre fue el plazo autoimpuesto para conocer los detalles de la primera propuesta, mientras que la segunda debería estar legislándose “antes de fin de año”.

En ese contexto, el rostro de Cataldo se dejará ver con mayor frecuencia en los pasillos del Congreso. El ministro de Educación, quien sorteó diversas controversias para llegar a su actual cargo, será el encargado de recolectar los votos que permitan aprobar ambas iniciativas.

En agosto de 2023, a menos de diez días de haber reemplazado a Marco Antonio Ávila, debió enfrentar uno de los momentos más difíciles de su cartera: el paro indefinido anunciado por el Colegio de Profesores tras rechazar la última respuesta a su petitorio.

Una vez saldado este capítulo, vinieron otros como el traspaso de colegios a los Servicios Locales de Educación Pública (SLEP) y la crisis de matrículas.

Estas dos últimas discusiones hicieron que parlamentarios de oposición pidieran su renuncia. “Nos cae bien, pero no sabe hacer la pega”, apuntaron desde la UDI. Con todo, Cataldo parece afirmarse en el puesto y será uno de los secretarios de Estado que se vean más expuestos durante 2025.

Las dos promesas que hereda Cataldo

De acuerdo al programa de gobierno de Apruebo Dignidad, no sólo se pondría fin al CAE, sino que también se crearía un sistema único de créditos —sin interés ni participación de bancos— hasta alcanzar la “gratuidad universal”.

En su última Cuenta Pública, el presidente Boric aseguró que en septiembre impulsarán un proyecto que busque reemplazar este mecanismo de pago y dar una “solución progresiva” a los deudores.

Si bien se desconocen mayores detalles de la iniciativa, el jefe de Estado sostuvo que “dará una solución progresiva y justa pensada en los deudores, especialmente en quienes han cumplido con sus deberes de pago y quienes no han podido cumplir por no tener ingresos para hacerlo, que son la gran mayoría”.

En cuando a la deuda histórica, la promesa del Gobierno fue compensar a los docentes de mayor edad durante el primer año de mandato y, al finalizar el período de cuatro años, beneficiar a un total de 60 mil afectados.

Este lunes, el Ministerio de Educación se comprometió a presentar un proyecto “antes de fin de año” para dar respuesta a los maestros. Sin embargo, al igual que en el caso anterior, todavía no se tienen certezas sobre su contenido.

El presidente del Colegio de Profesores, Mario Aguilar, señaló a BioBioChile que “las promesas no pueden ser solamente caballitos de batalla de las campañas. El CAE y la deuda histórica fueron propuestas firmes del candidato Boric, por lo que eso es absolutamente exigible por parte de la ciudadanía”.

De no cumplirse con el plazo comprometido por Nicolás Cataldo, el docente de 62 años afirmó que se movilizarán al igual que lo hicieron en 2023. “Espero que las palabras del presidente Boric y del ministro todavía tengan algún valor”, subrayó.

El reloj corre para La Moneda

Desde el oficialismo existe una alta expectativa de que ambas propuestas sean tramitadas y aprobadas durante la administración de Gabriel Boric. Pese a aquello, al gobernante le quedan menos de dos años en La Moneda y el tiempo podría no ser suficiente.

La diputada Emilia Schneider (CS), presidenta de la comisión de Educación de la Cámara, le endosó la responsabilidad a la oposición para que se pueda avanzar en esta materia.

“Va a depender de la voluntad que tengan. La derecha ya se ha pronunciado, tanto en votaciones como en declaraciones a la prensa, a favor de ambos compromisos. Espero que cumplan con su palabra y se pongan a disposición de dialogar y llegar a acuerdos”, comentó a este medio.

En tanto, Marcela Serrano (PC), integrante de la misma instancia, emplazó a todo el Congreso. “Los tiempos están siendo muy cortos y todas las necesidades que tienen las comunidades educativas tienen que dar paso a que nosotros podamos responder con una legislatura contundente”, indicó.

Los miembros de la oposición no son tan optimistas. El diputado Stephen Schubert (IND-REP) cree que “el Gobierno está comenzando su ocaso, por lo que no creo que tenga el tiempo suficiente. Además, ambos proyectos requerirían de muchos recursos que no vemos que el Gobierno tenga”.

Asimismo, recuerda que existen otras necesidades en materia educacional que también se vienen postergando. “Tenemos la inasistencia, el problema de la admisión escolar, los traspasos a los SLEP, la convivencia escolar y la calidad de la educación, cosas que son prioritarias”, explicó a BBCL.

Por su parte, Karen Medina (PDG) considera que las propuestas que elabora el Ejecutivo “no van a cumplir para nada las expectativas de la gente”. No obstante, confía en que “cumplamos más allá de los montos y que no se siga traspasando el problema a otros gobiernos. Espero que se den soluciones a la ciudadanía, aunque no sean las que esperan”.

“Poco probable que se aprueben ambos proyectos”

Desde la academia tampoco tienen fe en que se despachen ambas iniciativas antes de que Gabriel Boric deba entregar la banda presidencial en marzo de 2026.

José Joaquín Brunner, director del Doctorado en Educación Superior de la Universidad Diego Portales (UDP), expresó a BioBioChile que el proyecto del Crédito con Garantía Estatal tiene dos pies. “El primero es qué tipo de condonación muy acotada va a existir para aquellos que no pueden pagar por ningún motivo. El segundo es una redefinición del esquema global de apoyos estudiantiles”, detalló.

De acuerdo al experto, el primer ítem es de más fácil despacho. Sin embargo, armar un nuevo mecanismo de financiamiento “requiere de un trabajo previo del Gobierno con las distintas instituciones de educación superior para llegar a un consenso”.

Respecto al proyecto que podría reparar la deuda histórica, Brunner no ve “ninguna posibilidad” de enviarlo al Congreso durante la actual administración. Eso sí, calcula que se podría añadir alguna glosa especial en la próxima Ley de Presupuestos para apaciguar el conflicto entre el Gobierno y los profesores.

En la misma línea, Monona Valdés, docente de la Facultad de Educación de la Universidad Central, indicó que “es poco probable que se aprueben ambos proyectos en un año y medio”.

Ahora, a diferencia del académico de la UDP, cree que la evaluación de los grupos que obtendrían una remisión total del CAE sería la parte más complicada.

“Significaría levantar un estudio de todos los casos y verificar cuáles son los elementos distintivos para compensar la deuda. Lo veo bien inviable en este período. Quizá sí se podría hacer un catastro para identificar las diferentes situaciones, agruparlas y hacer una propuesta para que se pueda pagar el crédito, pero no subsanar esta problemática”, manifestó la doctora en Educación.

Cataldo, de tuitero a protagonista del Gobierno

Nicolás Cataldo, profesor de Historia y militante comunista desde 1998, ya ha ocupado tres cargos durante el mandato de Gabriel Boric: subsecretario de Educación, subsecretario de Desarrollo Regional y titular del Mineduc.

Hasta marzo del 2022, su carrera política se había desarrollado tras bambalinas. Fue asesor del Colegio de Profesores, colaborador de la exdiputada Camila Vallejo, integrante del equipo legislativo del Ministerio de Educación y jefe de gabinete en la Municipalidad de Cerro Navia.

A seis meses de llegar a La Moneda, Boric puso su confianza en él para que diera el gran paso. Cataldo ya estaba listo para relevar a Manuel Monsalve como subsecretario del Interior, pero una serie de tuits de 2011 frenaron sus aspiraciones.

“Carabineros torturadores”, “pacos infiltrados” y “estos perros no tienen límite” fueron algunas de las antiguas publicaciones que sellaron su primer fracaso.

En vez de suceder a Monsalve en Interior, el mandatario optó por asignarle la Subdere en reemplazo de Miguel Crispi. Este último, duramente criticado durante los últimos 12 meses por las polémicas transferencias a fundaciones, pasó a liderar el equipo de asesores del Segundo Piso.

Pero menos de un año duró el PC en el cargo, ya que —tras una acusación constitucional en contra del entonces ministro Marco Antonio Ávila— pasó a liderar la cartera de Educación.

Parlamentarios de todos los colores políticos reconocen a este medio que el secretario de Estado tiene un gran poder de diálogo. Sin embargo, este atributo no le garantizaría rendir con éxito sus dos futuras pruebas.

Mario Aguilar afirma que “conoce muy bien al profesorado, pero todos sabemos que los proyectos se validan en Hacienda. Creo que el ministro Cataldo tal vez tiene la voluntad de cumplir los compromisos, pero el presidente Boric tiene que hacer uso de sus atribuciones para que Hacienda no siga siendo el gran impedimento”.

La diputada Karen Medina posee una opinión similar, asegurando que “el ministro ha generado consenso en muchos temas. Tiene conocimientos técnicos y yo valoro sus aportes, lo que no significa que se vayan a subsanar los problemas de fondo”.

De parte del oficialismo, Emilia Schneider aclaró que el profesor “tiene toda la confianza del Frente Amplio para liderar estos desafíos, porque ha demostrado que es capaz de resolver conflictos, de generar acuerdos y de propiciar el diálogo”.