Esta semana, la Pontificia Universidad Católica de Chile entregó un particular manual a sus docentes: uno en el que indica recomendaciones a los profesores para no caer en actitudes, o en el hecho mismo, de violencia sexual contra los alumnos y alumnas del establecimiento.

Se trata del texto “Lineamientos y recomendaciones a la planta académica para la Prevención de hechos de Violencia Sexual en la Relación con Estudiantes”, el cual cuenta con una introducción a la temática y 9 puntos específicos donde se explican situaciones donde el docente puede incurrir en este tipo de agresión.

El manual fue enviado a los docentes este 15 de mayo en conjunto con un mensaje del rector Ignacio Sánchez, quien explica que el texto fue elaborado con ayuda de “estudiantes, funcionarios y académicos de distintas facultades, así como la FEUC, un equipo de profesionales de la dirección superior y el Vicerrector Académico”.

Específicamente, el documento explica el origen del mismo (política de la universidad y últimos hechos relacionados en el extranjero), los objetivos de este (los límites en la relación entre profesores y alumnos) y define en base a la Organización Mundial de la Salud (OMS) el concepto de violencia sexual.

“Cultura de respeto”, “asimetría” entre alumnos y profesores, “prevención” y “derechos” son algunos de los términos que se mencionan en la introducción y en relación a los cuales el compendio se encarga de explicar cómo deben funcionar entre estos.

Pero, además, existen 9 puntos en el manual que indican situaciones específicas en el comportamiento del docente y el alumnado:

1. “Solicitud de tareas o trabajos que vayan en contra de la legítima diversidad de creencias o convicciones relacionadas con la sexualidad”
2. “Realización de bromas o comentarios basados en estereotipos de género o relativos a conductas sexuales”
3. “Realización de comentarios sobre la apariencia física, vestimenta u orientación sexual de los estudiantes”
4. “Uso inadecuado en la docencia de figuras, dibujos, fotografías o imágenes de internet, que contengan contenido sexual”
5. “Acercamiento físico deliberado, excesivo o innecesario con los
estudiantes”
6. “Desarrollo de actividades y evaluaciones académicas en horario
no académico o fuera del ámbito universitario”
7. “Uso de redes sociales compartidas entre profesores y estudiantes
para fines no académicos”
8. “Realización de reuniones con estudiantes a puerta cerrada en
oficinas”
9. “Participación en actividades sociales extrauniversitarias con
estudiantes en contextos inadecuados”

En cada uno de dichos apartados, el texto profundiza en cómo el profesor debe abordar cada una de estas situaciones y el comportamiento ideal en casa una de ellas.

En la solicitud de trabajos a los alumnos, por ejemplo, se recomienda el análisis cuidadoso en los temas trabajados para no herir sensibilidades respecto de la sexualidad de todos los presentes.

Las bromas en base a estereotipos de género son prohibidas, comentarios por apariencia física también y el uso de imágenes explícitas de índole sexual como recurso pedagógico.

El manual pide a los docentes máximo cuidado con el acercamiento físico, evitar el desarrollo de actividades académicas fuera del ámbito universitario y no se recomienda el uso de redes sociales para la relación alumno-profesor.

Finalmente, recomienda no realizar reuniones a puertas cerradas y se solicita que la asimetría entre ambos, estudiante y docente, se mantenga en todo momento; incluyendo los espacios fuera de la universidad.

En tanto, el documento también entrega ejemplos muy claros para cada punto antes mencionado; los cuales pueden ser revisados en el anexo del texto en este enlace.

Al respecto de esta medida, el rector de la PUC se mostró esperanzado en lograr la prevención de la violencia sexual e instalar la cultura del respeto.

“Con estos lineamientos aspiramos a instalar en nuestra comunidad académica la reflexión en torno a las potenciales condiciones que pueden dar origen a hechos de violencia sexual en el marco del desarrollo de actividades académicas”, concluyó.

Recordemos que lo anterior ocurre en medio de tomas, paros y denuncias por violencia sexual en una serie de universidades de Chile, incluyendo a la misma UC.

Revisa el documento en su totalidad a continuación: